Barça

Dembélé por Martial: un rompecabezas para recortar masa salarial

El Barça explora fórmulas con el Manchester United para dar salida al extremo francés al mercado de invierno si no renueva como azulgrana

3 min
Ousmane Dembélé y Anthony Martial, de espaldas en un partido de la selección francesa.

BarcelonaLa resaca del Mallorca-Barça de circunstancias será movida. El Camp Nou acogerá el lunes por la mañana el tradicional entrenamiento de puertas abiertas y también la presentación de Ferran Torres, primer gran fichaje del mandato de Joan Laporta que todavía no puede ser inscrito porque no hay sufieicente margen salarial para hacerlo. "No podíamos esperar", justifican desde el club cuando se les pregunta por qué han oficializado la operación sin haber logrado el fair play necesario.

En esta lucha, la misma que supuso la salida a regañadientes de Leo Messi, se enmarca el encuentro que, también el lunes, está prevista en el área deportiva con el agente de Ousmane Dembélé. Y es que parte imprescindible del gesto salarial que hace falta para inscribir a Ferran pasa por renovar el contrato vigente del extremo normando. Una firma ahora permitiría ganar fair play por el diferimiento de un tramo de su sueldo de la actual campaña en más años, así como espaciar la amortización del coste de su fichaje. A diferencia de Pjanic o Coutinho, que el Barça devaluó al cierre 20/21, Dembélé tiene 27 millones para amortizar correspondientes al último año de contrato. Renovándolo, esta cantidad se dividiría, de forma que se relajaría el impacto en términos de margen salarial.

Firmar un nuevo compromiso con el extremo es vital para la construcción de un nuevo proyecto deportivo. Pero no esencialmente por la calidad del futbolista, sino por la derivada económica del entendimiento, tan necesaria para poder inscribir nuevos futbolistas tanto ahora como en verano. Es por eso que el Barça, que el día 30 de diciembre prácticamente dio por rota la negociación, se emplaza a un nuevo encuentro para rehacer los puentes con Moussa Sissoko y plantearle nuevas soluciones.

Ahora bien, el impedimento de una elevada prima de renovación continuará estando ahí. El agente no quiere renunciar, puesto que considera que Dembélé tiene suficiente caché para reclamar dinero solo por el hecho de firmar para un club en vez de otro. Según han informado varios medios, la petición llega a los 45 millones, una cifra inasumible para el Barça, que en el fondo sabe que el extremo no es tan estratégico. Sissoko encuentra que puede pedir estos signing bonus porque ve que la entidad tiene suficiente músculo financiero para pagarle 55 millones con variables al Manchester City por Ferran Torres, a parte de que no quiere renunciar a la carrera para adquirir a Erling Haaland.

El Sevilla, posible víctima colateral

Ante esta situación de debilidad, y de las dificultades evidentes para renovar a Dembélé a la baja, el Barça explora vías para poder perderlo de vista a medio curso si finalmente no se puede cerrar un acuerdo. Una de ellas implica el Manchester United, uno de los clubes que ha ofertado por el extremo y que pretendía llevárselo sin pagar ningún traspaso –pero sí signing bonus – este mismo verano. Conscientes de este interés, los negociadores azulgranas han sondeado los ingleses para ver si estarían dispuestos a avanzar la gestión a cambio de un pequeño traspaso por los seis meses de cuello, que coinciden con el tramo decisivo de la campaña, o de facilidades para obtener la cesión de algún futbolista del equipo que entrena Ralf Rangnick. En este sentido, y en la línea del que publicó el ARA a finales de noviembre, la pieza que cuadra en la ecuación es Anthony Martial, delantero polivalente que quiere abandonar Old Trafford en busca de minutos. El perfil de Edinson Cavani queda en segundo plan debido al interés en paralelo del Barça para incorporar a Álvaro Morata, avanzado por el diario As hace unos días. De hecho, el técnico del conjunto de Manchester ha cerrado las puertas a una salida del delantero uruguayo, a la vez que ha admitido que Martial está más fuera que dentro.

La respuesta del United a la propuesta condicionada del Barça es de predisposición. De aquí que la cesión de Martial en el Sevilla, tan avanzada hace solo unos días, se haya paralizado ante la posibilidad que los red devils asuman la ficha del delantero francés –4 millones limpios – para propiciar un préstamo provechoso al Barça a cambio de avanzar la incorporación de Dembélé al mercado de invierno. La operación es complicada y solo se ejecutaría si el Mosquito no aceptara la oferta azulgrana , pero si saliera adelante recordaría un precedente del 2018, cuando Malcom acabó en el Camp Nou después de tenerlo todo pactado para jugar en el Sánchez Pizjuán.

stats