LA SEMANA DE...

El KO de Casado en la era de la turbopolítica

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MARIONA FERRER I FORNELLS
2 min
Pablo Casado dirigiéndose al Círculo de Economía  el pasado viernes.

En la época de la turbopolítica, se puede pasar de estar arriba de todo a quedar fuera de juego en cuestión de días. Pablo Casado creía, después de las elecciones madrileñas, que tenía todos los vientos a favor y que los indultos supondrían el principio del fin para el gobierno de Pedro Sánchez. Pero el líder del PP ha recibido reveses por todos los lados esta semana: tanto dentro de sus propias filas, con Isabel Díaz Ayuso desafiándolo y poniendo en entredicho el papel constitucional del rey después del fracaso de la manifestación en Colón, como de mano de la patronal y de la Iglesia catalana. A la vez, ha visto cómo la Comisión Europea avalaba, incluso con buena nota, el plan de recuperación para enviar ya los fondos europeos.

Para la derecha española todo es blanco o negro. Las intervenciones del equipo de Casado en el Congreso se han convertido semanalmente en una ensaladilla rusa en la que indultos, diplomacia, inmigración, pandemia y economía, siempre aliñados con una buena dosis de frases ingeniosas, van de la mano. Sea cual sea el tema, se acabará con la misma frase: el gobierno de Sánchez está acabado. No hay lugar para los grises, ni para la negociación, ni para el pacto. En el año y medio de legislatura, Pedro Sánchez ha acabado encontrando antes la complicidad de la patronal, ahora también a favor de los indultos, que la de Casado.

La campaña del PP contra la medida de gracia no ha dado frutos. La bronca de Colón a Casado dio paso al fin de una recogida de firmas que no ha conseguido superar a la de Mariano Rajoy contra el Estatut -a pesar de tener a favor las firmas telemáticas- y ha culminado con el Congreso demostrando que la derecha española está en franca minoría después de rechazar la moción del PP contra los indultos. Casado difundió el viernes un vídeo junto al presidente del Círculo de Empresarios, una entidad pequeña al lado de la CEOE, para demostrar que no está solo en la crítica al gobierno de Pedro Sánchez. De hecho, Génova considera que el jueves hicieron una “emboscada” en Barcelona al líder del PP.

Crecen los traidores a la patria para partidos como Vox, que ha empezado una campaña para pedir la dimisión del presidente de la CEOE. Con la oposición a todo y todo el mundo, Casado cada vez queda más arrinconado junto a la extrema derecha mientras Ayuso sigue marcando el paso a la dirección estatal del PP. La campaña contra los indultos tenía que ser la operación de Casado para tapar de la corrupción al partido. No es solo la imputación de la que lo empujó a liderar el partido, María Dolores de Cospedal, sino el nuevo relato, en palabras del inspector de la Gürtel, Manuel Marocho, de cómo la policía política hizo todo lo posible para que dejara la cúpula de Mariano Rajoy fuera del caso. A Casado le quedan dos años de legislatura que se le pueden hacer muy largos. Las encuestas le sonríen, pero Sánchez -amante de los tiempos rápidos- juega a la vez una partida de ajedrez a largo plazo que para Génova es desesperante.

EL DETALLE
  • ¿Cuándo se concederán finalmente los indultos? Ha sido la pregunta recurrente al gobierno español toda la semana. Carmen Calvo fijó tres fechas: el 22 de junio, el 29 o bien ya el 6 de julio. Parecía que no se quería mojar, pero la ministra portavoz, María Jesús Montero, acabó diciendo el martes que serían “la semana que viene”. Minutos después lo desmentía a los periodistas: “¡He dicho semanas, con acento andaluz!”
  • El presidente andaluz, Juan Manuel Moreno (PP), quiso entrar con buen pie en las jornadas del Cercle d'Economia. "Montilla fue el primer presidente andaluz en Catalunya y yo soy el primer presidente catalán en Andalucía", proclamó, recordando que nació en Barcelona. Toda una evolución, teniendo en cuenta que en 2019 declaraba a 'El Mundo' su afecto por Catalunya, pero puntualizando: "No me siento catalán".
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