El PP cesa al vicesecretario de comunicación a raíz de la denuncia por maltratos

Lunes la presidenta de Nuevas Generaciones, Irene Pardo, lo denunció por un delito de lesiones en el ámbito de la violencia de género

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Albert Fernández Saltiveri, en el centro de la foto, entre Alejandro Fernández y Daniel Serrano

BarcelonaEl PP ha cesado al vicesecretario de comunicación, Albert Fernández Saltiveri, a raíz de la denuncia por presuntos maltratos que presentó la presidenta de Nuevas Generaciones, Irene Pardo. Tal como avanzó el ARA este viernes, la denuncia contra Saltiveri se presentó lunes por un delito de lesiones en el ámbito de la violencia de género. El partido tuvo constancia lunes mismo de la denuncia y decidió trasladar el caso al comité estatal de derechos y garantías de la formación, que le abrió un expediente. Hasta ayer, sin embargo, el PP no lo había cesado de su cargo a la dirección a la espera de lo que resolviera el comité de garantías. Este sábado los conservadores han informado en un comunicado que han decidido apartarlo de todas sus funciones al partido.

Es la segunda baja que tiene la dirección de Alejandro Fernández en pocas semanas a raíz de dos denuncias por presuntos maltratos. La primera fue antes de la campaña electoral del 14-F, cuando se hizo público que el entonces secretario general del PP, Daniel Serrano, estaba siendo investigado por una presunta agresión sexual a una compañera del partido. Serrano fue apartado de todas sus funciones. Y ahora ha sido el caso de Saltiveri. En la denuncia, Pardo reporta una serie de lesiones que habría sufrido fruto de las agresiones del hasta ahora vicesecretario de comunicación del partido.

De cara las próximas semanas, está previsto que el partido afronte una reestructuración en profundidad de su cúpula a raíz de estos dos casos, pero también por culpa de los nefastos resultados del 14-F. El pasado sábado, Saltiveri también fue cesado de su cargo como asesor de la Diputación de Barcelona del grupo popular. Según explicaron este viernes varias fuentes al ARA, el detonante de su destitución fueron los malos resultados en los últimos comicios catalanes. Una orden que vino directamente de Génova.

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