¿Cómo se puede destetar por la noche?

BarcelonaAl volver al trabajo después de ser madre o cuando se inicia la alimentación complementaria, si todavía se hace lactancia materna suele haber dos momentos que tienen el pecho como aliado, la noche y la hora de la siesta , cuando los bebés necesitan la succión afectiva para relajarse. Si nos planteamos destetar en estos dos momentos, hay que tener en cuenta, tal y como apunta la asesora de lactancia IBCLC Alba Padró, que desvincular la teta del sueño en niños menores de un año "es muy complicado". Lo es, continúa, “porque la succión aporta mucho placer y mucha calma”. Antes de esa edad, subraya la también cofundadora de LactApp, "gran parte de la alimentación es nocturna". En el caso de la siesta puede ser más sencillo, en tanto que "la mayoría, durante el día, duermen en otros lugares y con otras personas, bien sea en la escuela infantil, con los abuelos o con un cuidador o cuidadora", puntualiza Padrón.

¿Es conveniente esperar a alguna edad para destetar por las noches?

Padrón apunta a que no. “Debemos escuchar mucho a la madre, saber qué quiere y ayudarla a conseguirlo”, destaca. Hay madres que quieren destetar antes del año y otras a los cuatro o cinco años. Lo que hay que tener claro, puntualiza, "es que a cada edad deberemos aplicar unas recomendaciones específicas, ya que no es lo mismo destetar a los tres meses que a los tres años".

¿Es necesario que el destete sea progresivo?

La asesora de lactancia explica que habitualmente no se aconseja, en tanto que las criaturas "no saben qué hora es cuando se despiertan y no pueden entender por qué razón a unas horas de la noche hay pecho y en otras no". Y matiza: "Si son muy pequeños (menores de seis meses), se puede hacer, pero a medida que se hacen mayores y tienen las cosas claras no suelen aceptar hacer unas tomas de pecho sí y otras no". En estos casos, apunta, "lo que se hace es eliminarlas todas".

¿Qué estrategias podemos desplegar como alternativa al pecho?

Para la cofundadora de LactApp, la personalización de los recursos es muy importante, puesto que “para cada edad haremos cosas diferentes”. "No podemos leer un cuento de destete a una criatura de un año y esperar a que lo entienda", añade. Debemos tener presente, sin embargo, que para las criaturas mayores la parte de contención física suele ser complicada de aceptar las primeras veces: “No quieren que les toquemos, que les contengamos, y debemos darles el espacio hasta que sean ellos los que busquen el cuerpo del adulto.”

¿Es recomendable hacerlos partícipes, si ya son mayores?

Además de la edad, también habrá que tener en cuenta el carácter de la criatura, ya que "hay a los que el tema de anticipar lo que se avecina les va genial y otros que se angustian mucho" . Además, sugiere Padró, "si lo hacemos debe ser algo que contamos un par de veces y listos, que a menudo se explica de forma demasiado insistente y podemos tener un efecto rebote con un aumento de demanda".

¿Cómo gestionar esta resistencia?

Para Padró, debemos tener "muy claro" que la mayoría de criaturas ofrecen resistencia a dejar el pecho. Cuando nos ponemos plenamente en el destete veremos cómo nos sentimos nosotros. Y puntualiza: “A menudo, cuando el deseo de destetar está ahí pero no estamos seguras completamente, si la criatura llora o se enfada mucho es probable que queramos pararlo, y no pasa nada”.

¿Hay que evitar que coincida con otros cambios?

La recomendación es no hacer dos cosas importantes a la vez. Es decir, "si toca destetar, nos centramos en esto y, cuando esté hecho, ya sacaremos a la criatura de la habitación, si es lo que queremos", afirma Alba Padró. Habrá que aplicar el mismo criterio en otras situaciones clave: inicio de la escuela infantil, la llegada de un hermano, cambio de casa, etc. Y añade: "El destete es una situación con entidad y, por tanto, hay que dedicarle tiempo y mirada". Según Padró, con las "estrategias adecuadas, acompañamiento, paciencia y contención" el destete nocturno suele realizarse en "una semana".