¿Crisis en Marvel? El estudio superheroico, de capa caida
La gallina de los huevos de oro de Hollywood acumula frentes abiertos y pierde conexión con el público
BarcelonaEn 2019, Capitana Marvel, que introducía en el cine un personaje menor del panteón de la editorial Marvel, recaudó más de 1.000 millones de euros en la taquilla mundial, convirtiéndose en el mejor debut de un personaje del estudio tras el fenómeno Black Panther. Cuatro años después, las proyecciones de su secuela, The Marvels, que se estrena este jueves, apuntan a una taquilla mundial del primer fin de semana de 130 millones, una tercera parte de lo que hizo Capitana Marvel. Sería una sorpresa si al término de su trayectoria comercial recauda 500 millones. En cualquier caso, será insuficiente para cubrir un presupuesto (256 millones) que se ha disparado por el rodaje de numerosas escenas adicionales durante la fase de postproducción y que ha convertido The Marvels en la película más cara del estudio fuera de la saga Los Vengadores.
Para explicar el descenso de expectativas es necesario examinar el contexto: Capitana Marvel se estrenó unas semanas antes de Los Vengadores: Endgame, es decir, en la cúspide del reinado comercial del estudio, así que las críticas tibias no impidieron que el público acudiera en masa a los cines. Pero desde la pandemia, la situación en Marvel ha cambiado: el estudio ha encadenado resbalones comerciales –Viuda negra, Sangre-Chi, Eternals– y sólo ha superado la barrera de los 500 millones con apuestas seguras como Doctor Strange 2, Black Panther 2 oGuardianes de la Galaxia 3. El único éxito rotundo de este período, Spiderman: sin camino a casa, pertenece a una franquicia propiedad de Sony. Después de recaudar cerca de 30.000 millones en 15 años con sólo 32 películas (The Marvels es la 33a), la confianza del público en la marca Marvel se ha resentido, y ya ni siquiera funcionan las secuelas de personajes consolidados como Ant-Man & The Wasp: Quantumania.
En la pérdida de conexión con el público de Marvel tiene mucho que ver la propia estrategia del estudio, que en los últimos años ha multiplicado la producción de material superheroico para satisfacer la necesidad de contenidos de Disney+. Y aunque la plataforma no habla de cifras de visionado, series con presupuestos que duplican el de una temporada de Juego de Tronos como Invasión secreta o She-Hulk han logrado un impacto mínimo en la conversación cultural. Con la saturación de proyectos en Marvel, además, los controles de calidad se han relajado, especialmente en los efectos especiales de las series e incluso en películas como Quantumania, que llegó a la première con escenas a medio acabar. De hecho, hartos de ser exprimidos hasta el límite en jornadas maratonianas, los técnicos de efectos especiales de Marvel acaban de sindicarse para hacer frente a los sistemáticos abusos laborales del estudio.
Que no sea Kang, por favor
Otro frente abierto es el de Jonathan Majors, que interpreta a Kang al Conquistador en la serie Loki y en Quantumania, y sobre el que debía pivotar Kang Dinasty, la próxima entrega de Los Vengadores, y que será juzgado en unas semanas acusado de haber agredido a una mujer. El estudio se está replanteando a toda prisa sus planes de futuro y corren rumores de una posible reunión de urgencia de Los Vengadores originales, incluido Robert Downey Jr. El cambio de guardia no es un problema nuevo en Marvel: según el libro MCU: The reign of Marvel Studios, la compañía quería que Black Panther, Spiderman y Capitana Marvel fueran los héroes dominantes del estudio después de Endgame, pero la muerte de Chadwick Boseman y el fin del acuerdo con Sony por Spiderman obligaron a cambiar de planes. E incluso la continuidad de Brie Larson como Capitana Marvel cuelga de un hilo, porque la actriz es víctima de una campaña de ataques misóginos del sector más reaccionario del fandom y ha hecho saber que no tiene interés en seguir interpretando al personaje.
En la decisión de Larson también puede haber influido el caos del rodaje de The Marvels, en el que la producción se ha alargado tanto que la directora Nia DaCosta, un fichaje avalado por la propia actriz, se ha ido al Reino Unido para rodar su próxima película (Hedda, basada en el personaje de la obra Hedda Gabler de Ibsen) y no ha podido supervisar el rodaje de las escenas adicionales y la postproducción del filme. La película reúne a la Capitana Marvel con dos personajes surgidos de series de Disney+: Ms Marvel, una heroína adolescente y musulmana fan de los superhéroes, y Monica Rambeau, secundaria afroamericana de Wandavision que en los cómics llevó un tiempo el nombre de Capitana Marvel. Una alineación femenina y multiétnica en la que Disney no parece creer demasiado, ya que, en contra de lo habitual, Disney no ha organizado ninguna proyección de prensa en Catalunya.