Una Valencia árida, telúrica y mística llega a los cines
Laia Marull y Sergi López protagonizan 'La terra negra', de Alberto Morais
'La tierra negra'
- Dirección: Alberto Morais.
- Guión: Alberto Morais y Samuel del Amor.
- 98 minutos. España y Panamá (2024).
- Con Laia Marull, Sergi López, Andrés Gertrúdix y Abdelatif Hwidar.
Siempre respetaré a los cineastas empeñados en recorrer un camino impopular. Y no cabe duda de que el periplo de Alberto Morais le lleva a un lugar solitario: la suya es una trayectoria intratable en la voluntad de ascetismo, que nunca había resultado tan manifiesta como en La tierra negra, un filme que retrata el interior del País Valenciano con el misticismo telúrico y la aridez dramática con la que Bruno Dumont llamó a las puertas de la cinefilia hace casi tres décadas. En el centro del relato encontramos a Laia Marull (que ya había trabajado con el director en Las olas y La madre) en la piel de María, una mujer que, envuelta en un aura de fracaso, regresa al pueblo natal para trabajar con el hermano en el negocio familiar, un molino industrial. En el trabajo se incorpora también Miquel (Sergi López), un hombre de pasado turbio pero con una sensibilidad peculiar y, también, con un don sobrenatural para influir en los demás. La intimidad que surge entre ellos da los instantes más inesperados y cálidos de una película que, por otra parte, no logra modular de forma plenamente convincente sus giros más hostiles, sobre todo en lo que respecta al martirio al que acaba sometiendo al personaje de Marull. Un desequilibrio derivado de una rigidez autoimpuesta y algo afectada que también se traslada a parte de los actores, que Morais trata como modelos bressonianos y que a ratos parecen luchar por no seguir el instinto que les llevaría a un registro más naturalista.