Antonio Banderas y Emilio Aragón estrenan un musical sobre Jesús en el Poliorama

BarcelonaUna iglesia en ruinas ocupará el escenario del Teatro Poliorama desde este miércoles, 18 de septiembre, hasta el 13 de octubre. Antonio Banderas y Emilio Aragón presentan un nuevo montaje de Godspell, un clásico de la comedia musical norteamericana de los años 70. Aunque nació como un proyecto universitario, este espectáculo de Stephen Schwartz y John-Michael Tebelak aterrizó enseguida en los circuitos teatrales alternativos de Nueva York y se consagró como uno de los musicales juveniles que no pasan de moda. Tras estrenar el montaje en el Teatro del Soho Caixabank de Málaga "con las entradas agotadas durante muchos meses" –según ha explicado el productor teatral Toni Albaladejo, uno de los socios del Poliorama–, la compañía arranca en Barcelona una gira estatal con un nuevo reparto, encabezado por el actor barcelonés Andro Crespo.

"Godspell está basado en las parábolas del Evangelio de San Mateo y, aunque Jesús tiene un papel central, no creo que sea un musical religioso, sino que sobre todo habla del amor", dice Aragón, que como director de el espectáculo ha intentado adaptarlo a la realidad del 2024. "Hice una videollamada con Schwartz y le propuse cambiar un poco la primera escena para llevarla a la actualidad, con la guerra de Ucrania –explica– . Al principio me dijo que no, pero al cabo de dos días me dijo que hiciera lo que quisiera". El director describe el espectáculo como un "maravilloso cajón de sastre", fruto de un "trabajo sobre todo coral, aunque haya canciones específicas para cada personaje". "En esta sociedad que pide a gritos más empatía y generosidad, más besos y abrazos, en esta sociedad en la que leer las noticias es un deporte de riesgo, necesitamos más espectáculos así", añade.

Banderas y Aragón viven el proyecto con ilusión, sobre todo porque les ha permitido resolver "una asignatura pendiente desde hace tiempo, que era trabajar juntos". "Por casualidades de la vida, resulta que Godspell fue la primera comedia musical que Antonio [Banderas] vio de pequeño y también fue la primera que vi yo cuando llegué a España con la familia", explica Aragón, que cuando descubrió esta coincidencia pensó que " la vida a veces conspira".