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Ha llegado el momento de cerrar el círculo: el Barça, de víctima a verdugo

Las azulgranas levantarán su segunda Champions si se imponen al Lyon, el equipo que las hizo despertar

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Foto de familia de la expedición del Barça antes de jugar la final de la Champions en Turín

Enviada especial a TurínEl Barça puede conseguir la Champions perfecta. El equipo dirigido por Jonatan Giráldez puede "cerrar el círculo" y llevarse su segunda Champions consecutiva superando al Olympique de Lyon (19 h, TV3 y DAZN), equipo que les dio un golpe de realidad del que resurgieron como campeonas de Europa. "Es para hacer la película perfecta. Este ciclo empezó con la derrota contra ellas y ahora podemos revalidar el título contra el mismo equipo que nos hizo ver el nivel mínimo para ganar la Champions", reconocía Alexia Putellas antes de la gran final. Para poder levantar el trofeo, sin embargo, hay que superar a las francesas, que han venido con "muchas ganas de comérselas".

Duelo por la corona europea

El conjunto francés ha sido el dominador del fútbol femenino en la última década y no piensa abdicar de su trono. Sonia Bompastor, entrenadora del Lyon, tiene muy claras cuáles son las fortalezas de este Barça tricampión y buscará incomodar a las azulgranas a pesar de cederles el control de la esférica. El Olympique de Lyon "ha mantenido una estructura bastante jerárquica y con experiencia los últimos años. Mantiene muy bien su identidad. Es un equipo al que no le gusta tener todo el rato la pelota y son capaces de tener asociaciones. Son perfiles de jugadoras que se adaptan a cualquier escenario", radiografiaba el técnico culé antes del duelo que coronará a las reinas de Europa.

El Lyon tiene muchas ganas de recuperar su prestigio. En la rueda de prensa previa al partido, Wendie Renard y Ada Hegerberg, sus dos jugadoras más temidas, lo dejaron muy claro: "El partido dirá. Llegamos a la final con el sentimiento de que no tenemos nada que perder. El vestuario tiene buenas sensaciones y estamos preparadas mentalmente y físicamente", remarcaba Hegerberg, que volverá a disputar una final contra el Barça, su víctima preferida y a quien marcó un hat-trick en Budapest. "Estamos aquí para escribir nuestra historia. Lo que importa es la victoria; queremos irnos con el trofeo. Juntas hemos sufrido desde el comienzo del año y hemos podido revertir la tendencia a veces. Tenemos hambre", añadía Renard.

La final de este sábado puede consolidar el reinado del Barça en Europa o devolver al trono al eterno campeón. "Es una final que llega en el momento perfecto; tenemos ganas de revancha. Jugamos contra ellas en Budapest y este año en la pretemporada y no las hemos ganado nunca", afirmaba Jonatan Giráldez. Un partido para la historia en que noventa minutos dictarán sentencia y coronarán al campeón en un duelo eléctrico. El mejor partido posible se jugará en Turín.

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