Hermoso denuncia acoso constante ante el juez a raíz del beso de Rubiales

MadridCuatro meses después del beso no consentido del expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, en la delantera de la selección femenina Jennifer Hermoso en la celebración del Mundial en Australia, la futbolista ha declarado ante el juez de la Audiencia Nacional que investiga el caso, Francisco de Jorge. Hermoso ha denunciado que sufrió "acoso constante" tanto en el trayecto de avión de regreso como en el viaje de celebración posterior que realizaron las mundialistas a Ibiza. Fuentes que asistieron a la declaración, que duró más de dos horas, explicaron que el atacante reiteró, a preguntas de la Fiscalía, que el beso fue inesperado y en ningún caso consentido.

Hermoso ha confirmado en sede judicial que el acoso alteró su vida normal y le causó desasosiego y tristeza. La jugadora también ha explicado que se fue dando cuenta progresivamente de la gravedad de los hechos. A la salida, se acercó a los medios de comunicación y aseguró que se sentía "fuerte" y que en la declaración había ido "todo bien". "Queda en manos de la justicia", ha añadido, agradeciendo el trato mediático recibido antes de regresar a México para iniciar la etapa profesional en el Tigres.

En la declaración de Hermoso ante el juez, la jugadora ha ratificado el relato de los hechos que hizo a principios de septiembre ante la Fiscalía y que comportó que el ministerio público presentara una denuncia por agresión sexual y coacciones contra Rubiales. Aparte del expresidente de la RFEF, también están investigados el exseleccionador Jorge Vilda, el director de la selección masculina, Albert Luque, y el director de marketing de la RFEF, Rubén Rivera.

La versión de Hermoso contradice la de los investigados, que negaron que hubieran presionado tanto a la jugadora como a su entorno. En la declaración ante la Fiscalía, publicada por Telecinco un mes después, Hermoso explicó cómo Rubiales la sacó del vestuario para hablar del beso. "Salí pensando: 'Hostia, ya está'. Pensaba que me soltaría lo que fuera para que quedara bastante a los hechos. Yo entonces no era consciente de ello, pero ellos [Rubiales y otros cargos de la RFEF], desde fuera, sí. Me empecé a sentir incómoda ya pensar que lo que había pasado era grave. Que no era algo muy normal. Yo ya lo había oído en un primer instante y, en ese momento, empecé a ser más consciente de ello" .

Hermoso también recordó que, hasta el beso no consentido, mantenía una "relación cordial y sin nada extraño" con Rubiales y que durante la celebración del Mundial intentó dar el "corazón fuerte" pese a la incomodidad que le había generado el beso. En su declaración como investigado, en cambio, el expresidente de la RFEF aseguró que el beso había sido "una muestra de cariño" que fue "natural" e insistió en que lo había hecho con "consentimiento". La jugadora insistió en que no fue así. Vilda y Rivera negaron haberla puesto contra las cuerdas posteriormente.

Con esta declaración, la causa contra Rubiales entra en la fase final. Tomada declaración a Hermoso ya los investigados, así como a los principales testigos –como la también jugadora de la selección Alexia Putellas y otras compañeras de equipo, el hermano, una amiga de la víctima y miembros de la RFEF–, el magistrado deberá de valorar si ya tiene suficientes indicios para proponer abrir juicio contra Rubiales y los tres investigados por coacciones.