Roger Federer pone punto final a dos décadas de elegancia en las pistas de tenis

BarcelonaEl tenis cierra definitivamente una época. Roger Federer, el hombre que dio paso a la considerada mejor época de este deporte, ha anunciado su retirada a través de su cuenta de Twitter. El deportista suizo, de 41 años, no compite desde hace un año y medio por culpa de varios problemas físicos, que no ha podido superar. La retirada se hará efectiva después de la copa Rod Laver, una competición que enfrenta a los mejores jugadores europeos con los del resto del mundo, impulsada por el mismo Federer, y que se celebrará este fin de semana en Londres. El suizo ha dominado el juego como pocos, pero también los negocios fuera de la pista, y ha conseguido mantener siempre una imagen tan inmaculada como la ropa blanca que usaba cuando ganaba cada año en Wimbledon, el escenario de sus grandes éxitos.

Justo la semana en la que un joven de 19 años, Carlos Alcaraz, ha llegado al número 1 mundial, pliega el primero de los tres mosqueteros que han elevado el tenis a cotas nunca antes visas. Rafa Nadal y Novak Djokovic se han afanado a felicitar al suizo, con quien han mantenido una fuerte rivalidad marcada siempre por la elegancia y el respeto. Durante muchos años, Federer era un rival imbatible. Después lo pudieron superar, pero sin que afectara al aura del jugador de Basilea, seguramente el tenista más estiloso que jamás haya pisado una pista. Federer se retira con 103 títulos ganados, 20 de ellos de Grand Slam. Ha ganado 1.251 partidos y ha perdido 275, con unas ganancias económicas de 130,5 millones de dólares.

Federer es hijo de un suizo y una sudafricana que se conocieron en una empresa farmacéutica de Johannesburgo. Los dos habían jugado a tenis, pero el padre solo para pasárselo bien. La madre sí que apuntaba maneras, pero no creyó que se pudiera dedicar a ello. Los dos decidieron que para formar una familia era mejor lugar Suiza que Suráfrica, y marcharon a Basilea, la ciudad de Robert, el padre, en los 70. Y allí es donde nació Roger, que practicó un montón de deportes, como el bádminton, el balonmano y el fútbol: es un gran forofo del Basilea. De hecho, iba a una escuela donde dos hermanos unos cursos por encima, los Yakin, llegaron a la selección suiza, haciendo que el fútbol fuera el deporte que todo el mundo practicaba en el colegio. Él también, pero en casa se hablaba de tenis, porque la madre, Lynnette, se había apuntado a un club para ganar títulos en categoría de veteranos. Fue en este club, el Old Boys de Basilea, donde Federer fue escogido como recogedor de pelotas para el torneo de Basilea. De bien cerca, analizaba los golpes de los grandes campeones que pasaban por la ciudad, y después los imitaba. En 1996, con 14 años, debutó en el circuito, pero empezó a llamar la atención cuando ganó el título juvenil en Wimbledon en 1998. Aquellos años, sin embargo, no conseguía encontrar la paz mental. Era un jugador nervioso, con gran potencial, pero que se descentraba y se dejaba afectar demasiado por las críticas. Federer fue de los primeros jugadores que trabajó con psicólogos para hacerse fuerte y superar los problemas que había sufrido cuando lo enviaron a una academia en el sur de Suiza, donde los niños francófonos se reían de su acento: él proviene de la parte de Suiza donde se habla alemán.

Dos décadas de gloria

El primer triunfo llegó en 2001, cuando obtuvo el primer título de su carrera en el torneo de Milán, con 19 años, derrotando al francés Julien Boutter. Entonces todo el mundo tenía claro que Federer era un jugador especial, como había demostrado los meses anteriores eliminando a jugadores de nivel como Carles Moyà, que venía de ganar Roland Garros. El año 2001 todo cambió con las primeras victorias, como la de la Copa Hopman (torneo mixto con jugadores y jugadoras del mismo país) formando pareja con Martina Hingis, y el de Milán, en un torneo que ya no existe, porque se dejó de jugar en 2005. Fue el primer título de una racha de 19 años consecutivos ganando como mínimo un torneo, del 2001 al 2019. Federer llegó a ganar 24 títulos consecutivos desde octubre del 2003 a octubre del 2005, una racha histórica que empezó en Viena cuando se impuso en su 17.ª final. Federer fue capaz, en su momento, de liderar el ranking de la ATP durante 310 semanas, 237 de ellas de manera consecutiva. En 2003, sobre el césped de Wimbledon, ganó su primer Grand Slam, e inició un reinado que ha durado casi dos décadas.

"Jugar contra él era muy complicado. No era el más rápido, ni el que tenía el mejor servicio... pero no tenía puntos débiles. Mentalmente era muy fuerte y conseguía detectar tus defectos –explica David Ferrer–. Y es un tipo muy normal fuera de la pista", añade. Casado con la ex jugadora eslovaca Mirka Vavrinec, a quien él siempre agradece que le haya ayudado a estar más centrado, Federer creó en 2013 la agencia Team8 con su representante, Tony Godsick. La agencia ha llevado a otros jugadores y organizado la Copa Rod Laver, donde por última vez, el jugador más estiloso de todos los tiempos deslumbrará sobre la pista.

"De todos los regalos que me ha dado el tenis, me quedo con la gente que he conocido. Me dirijo a vosotros para anunciaros una cosa –explica Federer al inicio del vídeo de despedida–. He sufrido lesiones en estos últimos años y mi cuerpo me ha dejado claro que no puedo continuar. Es una decisión muy dura y echaré mucho de menos este deporte, pero celebro haber dado todo lo que he tenido y que el tenis me haya dado mucho más de lo que yo le he dado". Al final de "una aventura maravillosa", cómo ha dicho el suizo, dirá adiós después de unos tres últimos años que han supuesto "un reto en forma de lesiones y operaciones". Después de 24 años en la élite, el suizo se va habiendo ganado 103 títulos, 20 de ellos Grand Slams, y un oro olímpico en los Juegos Olímpicos de Pekín.