La competencia crece en los concursos de la Generalitat

BarcelonaEl número de ofertas presentadas por empresas en los concursos de la Generalitat se disparó en 2021 respecto a un año atrás. La administración catalana también vio cómo aumentaba el número de ofertas recibidas, de media, por cada licitación publicada, y rebajó notablemente las adjudicaciones con carácter de emergencia una vez pasado el momento más complicado de la pandemia, según el último informe sobre la concurrencia en la contratación pública publicado por el departamento de Economía.

Concretamente, el número de ofertas enviadas pasó de 58.930 en 2020 a 71.187 el año pasado, lo que supone un incremento del 20,8%. Esto ha hecho que la media de ofertas recibidas en cada licitación crezca ligeramente, de las 5,91 de 2020 a las 5,94 de 2021. Es decir, que cada vez que la Generalitat publica un concurso recibe propuestas de casi seis empresas. Hay que tener presente, sin embargo, que según el tipo de concurso, el departamento o el sector las cifras varían sustancialmente.

El documento también detalla que en todo el ejercicio 2021 la Generalitat publicó 12.714 licitaciones, de las que se adjudicaron 11.897 por un valor de 4.159 millones de euros. De este modo, pues, 817 licitaciones, un 6,4% del total, quedaron desiertas, ya sea porque nadie se presentó o porque las compañías que sí que se presentaron al final acabaron desistiendo. Son cifras superiores a las de 2020, cuando se adjudicaron 3.015 millones de euros y quedaron desiertas un 5,5% de las licitaciones.

Ahora bien, estos datos no incluyen las cifras de licitaciones de emergencia, que se adjudican directamente a una empresa en casos justificados por catástrofes naturales, accidentes o, como es el caso los últimos años, el estallido de una pandemia.

A la hora de hacer comparaciones, en 2020 es un año problemático, puesto que la pandemia afectó toda la actividad del Govern y se tuvieron que hacer gastos extraordinarios, así como cambios en el gasto habitual en todos los ámbitos de la administración. Otro elemento a tener en cuenta es que en 2020 el Parlament aprobó un presupuesto que posteriormente se tuvo que retocar de forma significativa a medida que avanzaba la pandemia, unas cuentas que se prorrogaron para 2021. El año pasado ya fue "un escenario de casi normalidad", a pesar de que todavía "se arrastraron" algunas dinámicas fuera de lo que era habitual provocadas por la pandemia, explica al ARA Neus Colet, directora general de contratación pública del Govern.

En cuanto a las licitaciones de emergencia, las cifras se dispararon en 2020 y el año pasado ya se produjo una "disminución", resalta Colet. Hace dos años, la Generalitat adjudicó por esta vía más de 732 millones de euros en 3.031 contratos, la mayoría de los cuales correspondientes a material y servicios sanitarios para hacer frente a la pandemia. Por el contrario, en 2021 los datos cayeron: se firmaron 525 contratos con un valor sumado de 175 millones.

En este sentido, Colet destaca el acuerdo marco para el suministro de material sanitario para el covid, que se publicó el febrero de 2021 y que permite agilizar las compras para el sistema de salud sin tener que recurrir a contratos de emergencia. Esto permite a la administración contar con más ofertas.

Las empresas públicas adjudican el grueso del pastel

El informe hace patente, un año más, que los departamentos del Govern tienen un peso mucho más bajo en la adjudicación de contratos, puesto que solo publican el 14% de las licitaciones. El 86% restante va a cargo de las empresas y los organismos de la administración, como por ejemplo el Instituto Catalán de la Salud (ICS), infraestructures.cat o la Agencia Catalana del agua.

Los datos demuestran que el tipo de concurso tiene un impacto directo en el número de compañías que se presentan. El procedimiento abierto –el más habitual– aumenta la media de ofertas hasta 6,7, mientras que en los procedimientos con un acuerdo marco es de 6,4. Los acuerdos marco son procedimientos que permiten centralizar y crear "lotes" para evitar "cerrar mercados", explica Colet. Un acuerdo marco permite por ejemplo a empresas de limpieza presentarse para ofrecer sus servicios; posteriormente la Generalitat crea varios lotes según sus necesidades: según el territorio o el tipo de edificio –uno para oficinas y otro para escuelas–, lo que da más posibilidades a pymes o empresas fuera del área metropolitana de Barcelona.

En cambio, la concurrencia cae drásticamente hasta las 1,92 ofertas por licitación en los procedimientos negociados sin publicidad. Estos casos son aquellos en los que la administración no tiene muchas alternativas, o solo una, como por ejemplo un medicamento que está patentado solo por una farmacéutica o en el caso de compras de obras de arte. Colet destaca que el número de ofertas en este tipo de contratos "va creciendo" con los años y "se acerca a las dos" ofertas de media.