Guardiola quiere que el Cercle “reconecte con una sociedad civil que ha cambiado mucho”

La sociedad civil ya no existe tal como la conocíamos. “Ha cambiado mucho y el Cercle d'Economia está anclado en el viejo modelo”, ha advertido Jaume Guardiola durante la presentación de su precandidatura a las elecciones del Cercle. Por este motivo, el aspirante a presidente se ha propuesto que la entidad “reconecte con la sociedad civil” que ha emergido. 

“Muchas empresas familiares ya no lo son”, ha explicado en referencia a la manera como tradicionalmente se articulaba la sociedad civil de Barcelona y Catalunya. “Muchas de las familias empresarias tienen un family office”, ha dicho. En resumen, han pasado de vivir de la empresa a hacerlo de la inversión. Ahora, ha añadido Guardiola, “ha surgido una nueva sociedad civil: el mundo tecnológico, las ciencias de la salud, la economía de la salud, todo lo que está alrededor del supercomputador o la población flotante que ha venido a Barcelona porque lo ha escogido”. En su opinión, la entidad tiene que salir a buscar estos nuevos grupos porque “el Cercle es la expresión más genuina de la sociedad civil”.

Reconectar con estos grupos es el primer reto que se ha marcado Guardiola. El segundo es que “el socio tiene que sentirse más orgulloso de pertenecer al Cercle” y, para que así sea, cree que las actividades que el Cercle organiza tienen que ser atractivas, además de tener un contacto más continuado e intenso con los socios. “Creen que no tenemos suficientes organismos para tomar su opinión”, ha explicado Guardiola como resumen de los contactos que en los últimos tiempos ha ido manteniendo con los aproximadamente 1.200 socios de la entidad, de los cuales tan solo una sesentena tienen menos de 40 años. 

El Cercle celebrará este verano, por primera vez, las elecciones con más de un candidato. Por un lado, Guardiola; del otro, Rosa Cañadas. El primero era consejero delegado del Sabadell hasta hace un año, mientras que la segunda preside la fundación Tanja. A pesar de la petición de los expresidentes del Cercle para que intentaran presentarse en una candidatura conjunta, “no ha habido espacio para el encuentro”, ha dicho el precandidato. Mantuvieron una reunión, pero fue “poco productiva y con poco diálogo”.

Guardiola también es presidente de la comisión económica del FC Barcelona (un cargo que dejará si gana las elecciones del Cercle por posibles incompatibilidades, ha dicho) y de Esade. “Cuando dejé el banco mis ganas e ilusión eran hacer cosas para la sociedad civil”, ha explicado.

Los cinco ejes del Cercle

Guardiola ha resumido los cinco ejes alrededor de los cuales gira el Cercle: los tres primeros (democracia, Europa y economía) están presentes desde el origen. Pero hay dos que han adquirido mucho protagonismo los últimos años: Catalunya y Barcelona.

Sobre el primero, Guardiola ha dicho que “el Cercle no puede rehuir el debate” del futuro político de Catalunya, y lo tiene que hacer “con la transacción [entre los miembros de la junta directiva], el punto de encuentro y buscando una solución que represente a la mayoría de los catalanes”. 

Y sobre el segundo, el precandidato ha expresado que “Barcelona es esencial para el Cercle” y, de hecho, ha aplaudido que la reunión anual de la entidad se haya trasladado a la ciudad después de muchos años en Sitges. “La tendencia es que el mundo se hará necesariamente a través de las grandes metrópolis y tenemos que hacer que [Barcelona] pueda competir en las mejores condiciones posibles”, ha afirmado.

Guardiola incluso se ha tenido que excusar por el hecho de ser amigo de Artur Mas. Cuando le han preguntado por una presunta vinculación suya con el independentismo ha afirmado: “Yo no soy independentista. Acostumbro a tener amigos de diferentes gustos políticos, deportivos o musicales”.