El Hotel Barcelona Apolo, también en venta por 90 millones

BarcelonaEl desembarco de capital en busca de hoteles en Barcelona no se para. Las restricciones de la pandemia han situado muchos establecimientos en una situación desesperada y esto lo están aprovechando los fondos para desembarcar en la ciudad a la caza de activos a bajo precio. El último hotel que ha colgado el cartel de “se vende” es el Barcelona Apolo, operado por Meliá en la avenida Paral·lel.

Según han explicado fuentes conocedoras de la operación al ARA, el establecimiento está en pleno proceso de venta y su propietario, el fondo norteamericano Värde Partners, muy activo en el sector hotelero, pide una cantidad próxima a los 90 millones de euros. La primera ronda de ofertas acaba el próximo martes y los compradores más interesados podrán presentar en marzo sus ofertas vinculantes.

El establecimiento, de cuatro estrellas, está operado por la cadena mallorquina Meliá y tiene 314 habitaciones. Si bien se vio obligado a cerrar en marzo del 2020 con el estallido de la pandemia, reabrió las puertas el 30 de agosto y desde entonces ha seguido acogiendo huéspedes hasta ahora, a pesar del aumento de restricciones para hacer frente al covid de los últimos meses. 

La situación del sector es grave por la abrupta caída del turismo internacional (que roza el 80%) y porque hoy por hoy la ocupación de los hoteles no pasa del 15%. Esto ha propiciado que en los últimos meses el mercado de compraventa de activos haya estado muy vivo. Este miércoles se ha sabido que el grupo alemán Freo prevé invertir 400 millones de euros en activos inmobiliarios y hoteles en los próximos dos años en España. También la gestora de fondos Mazabi anunciaba la compra de un hotel en Menorca y la venta de otro en Ibiza.

El Mandarín y el Juan Carlos I

Esta situación es generalizada. Tal como ha publicado el ARA este miércoles, dos emblemáticos hoteles de cinco estrellas barceloneses, el Mandarin y el Juan Carlos I, están ahora mismo en el mercado. Reig Capital ha reiterado que el Mandarin no está en venta; diferentes intermediarios e inversores insisten que el establecimiento está en el mercado. En cuanto al Juan Carlos I, su elevada deuda –unos 80 millones–, el hecho que está situado en terrenos del Ayuntamiento y una lucha por el poder en la empresa propietaria, la saudí Barcelona Projects, complican la operación.