Indra desarrolla una IA propia para afrontar la "guerra híbrida"
La compañía de defensa en la que el Estado tiene un 28% del capital gana 291 millones hasta septiembre, un 58% más
MadridIndra, la empresa de defensa española en la que el Estado tiene un 28% del capital social, escala posiciones dentro del sector de la defensa para que los gobiernos, pero también las compañías, puedan afrontar lo bautizado como "guerra híbrida", y que la invasión de Rusia en Ucrania ha puesto en el punto de mira, sobre todo en la Unión Europea. Se trata de una forma bélica que se aleja de los ataques convencionales e implica sabotajes, espionaje o ataques informáticos. Es en ese contexto que Indra ha desarrollado una inteligencia artificial (IA) propia (será una tecnología soberana que no dependerá de terceros) para combatirla. Este jueves la compañía que preside Ángel Escribano ha presentado públicamente a IndraMind, cuya plataforma dependerá esta IA.
Esta plataforma es la que se comercializará en países y empresas y no sólo incluirá una capacidad avanzada de visualización en tiempo real, sino también la capacidad de gestionar datos de forma masiva, entre otras cuestiones. Se aplica, básicamente, a través de una tecnología software que podrán incorporar los ejércitos, pero también la policía o grandes compañías que, por ejemplo, trabajen con información crítica y quieran blindarla ante una ciberamenaza, como puede ser un banco o una utility (empresa que se dedica a un servicio esencial). Por su parte, un ejército podrá utilizarla en una zona de combate y "anticiparse", defienden desde Indra, o frente a ciberataques, ataques a infraestructuras críticas o emergencias civiles como inundaciones o incendios; mientras que la policía puede incorporarla en contexto de manifestación de la sociedad civil o en el control de las fronteras. El uso de esta plataforma permitirá recibir información instantánea de lo que ocurre y también debe servir para ser más "resilentes".
La compañía prevé ingresar 300 millones de euros por este negocio –IndraMind es, más allá de la plataforma, una de las áreas de negocio de la empresa– y ha reubicado a 3.000 personas para desarrollarlo. El grueso de la actividad se reparte entre Madrid y Cataluña, según explicó el director general de IndraMind, Ignacio Martínez.
Indra dispara ganancias
Sin embargo, en un momento en que el gasto público en defensa está en efervescencia, Indra dispara beneficios. La empresa de defensa y tecnológica que preside Ángel Escribano ganó 291 millones de euros entre enero y septiembre de 2025, un 58% más que en el mismo periodo del año anterior, según ha comunicado este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). De hecho, la compañía en la que el Estado controla el 28% del capital prevé superar los 10.000 millones de euros en 2026 en lo que se refiere a los encargos en defensa gracias, sobre todo, a la adjudicación de los programas especiales de modernización, los llamados PEM, del gobierno español.
Ante esta buena marcha del negocio, Indra ha anunciado un nuevo Capital Markets Day con inversores y analistas en el segundo trimestre de 2026 (entre abril y junio) para poner en marcha la segunda parte de su plan estratégico. "La aceleración del plan estratégico nos prepara para liderar la entrega de los programas especiales de modernización, para los que ya estamos movilizando todo el ecosistema industrial [en el Estado]", ha destacado el consejero delegado de la compañía, José Vicente de los Mozos.
Hasta septiembre, la cartera de encargos ha crecido un 35% gracias a la consolidación y control del consorcio TESS Defence. Destaca el programa de vehículos blindados 8x8 Dragón del ministerio de Defensa, acumulando retrasos. De los Mozos recalcó "el avance de todas las unidades de negocio, especialmente el aeroespacial y de defensa". Hasta septiembre, los ingresos de la compañía aumentaron un 6% hasta los 3.611 millones. Por áreas, tráfico aéreo crece un 16%, defiende un 14%, la filial Minsait un 3% y movilidad un 1%.
Más consolidación
Más allá del negocio, Indra busca cómo fortalecerse firmando alianzas con otras empresas, como ha sido el caso de la catalana Ficosa, pero también a través de la adquisición de compañías. Aquí destaca la empresa española del sector de la defensa Escribano Mechanical & Engineering (EM&E Group), que preside Javier Escribano, hermano de Ángel Escribano.
Esta compra, sin embargo, no tiene un planteamiento fácil por las voces internas que discrepan. En concreto, las consejeras independientes Olga San Jacinto y Coloma Armero se han mostrado críticas con la posible adquisición, explican fuentes empresariales al ARA. Estas consejeras verían en la compra un conflicto de interés, indican las mismas fuentes, aunque también está en el punto de mira la valoración que se hace de la empresa que pilota Javier Escribano, al tiempo que tiene un 14,3% del capital social de Indra. De hecho, ambas empresas han contratado a diferentes firmas para estudiar la fusión. En cualquier caso, más allá de la ambición de Ángel Escribano, la compra cuenta con el visto bueno del gobierno español, que quiere hacer de Indra el "campeón" español de la defensa para que pueda competir con otras empresas europeas.