Filología catalana: una apuesta laboral segura

Los estudios de filología catalana viven un momento de oportunidad. Ante la creciente necesidad de profesionales formados en lengua y literatura catalanas, y la proyección de jubilaciones en el sector educativo y administrativo, la Generalitat de Catalunya anunció en el marco del Salón de la Enseñanza un programa piloto de becas para el curso 2025-2026. La medida se inscribe dentro de la segunda edición de la campaña "Tria Filologia Catalana", que busca visibilizar el potencial laboral de esta titulación universitaria.

Según datos de la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario (AQU), el 96,7% de los estudiantes de filología catalana en la Universidad de Barcelona están trabajando, la mayoría en trabajos relacionados con su formación, y un 83% lo hacen tres meses después de haber finalizado los estudios. Unas cifras que contrastan con la habitual percepción de estos estudios como poco rentables y que apuntan hacia un cambio de paradigma. El aumento del 21% en las matrículas del grado entre los cursos 2023-2024 y 2024-2025 parece confirmarlo.

La campaña, coordinada con los departamentos universitarios de filología catalana, desea desmontar mitos sobre estas carreras y valorar la diversidad de salidas profesionales. El discurso institucional subraya la necesidad de garantizar el relevo profesional en un ámbito considerado clave para el país.

Demanda de relevo generacional

El departamento de Política Lingüística, el departamento de Educación y el Consorcio para la Normalización Lingüística prevén una ola de jubilaciones en los años que vienen, tanto en el ámbito del profesorado -docentes de catalán para la secundaria, para adultos, para las aulas de acogida y para los cursos en el extranjero- como en la administración pública -planifica. Además, el sector privado también busca a profesionales con conocimiento profesional del catalán para trabajar en editoriales, medios, agencias de publicidad, etc.

Ante esta creciente necesidad laboral de especialistas en lengua y literatura catalanas, el departamento de Política Lingüística de la Generalidad de Cataluña amplía y pone en marcha por segundo año consecutivo una campaña para promover el acceso a los estudios de filología catalana. Esta iniciativa, que el pasado año ya tuvo una buena acogida, se consolida y crece, y lo hace con una novedad destacada: la puesta en marcha de un programa de becas dotado con más de 100.000 euros, que prevé ofrecer 25 ayudas mensuales de unos 500 euros a estudiantes de toda Cataluña.

Programa piloto de becas

La convocatoria se regirá por criterios de excelencia académica, situación económica y conocimiento de lenguas, entre otras, y reservará cinco becas a estudiantes con conocimientos de lenguas vinculadas a la inmigración y dos para quien quiera cursar estudios de aranés en el marco de los estudios occitanos. Las 18 restantes serán de convocatoria general. La iniciativa nace como prueba piloto con voluntad de continuidad y ampliación en función de los resultados y el impacto que genere.

"La lengua necesita a los mejores profesionales para responder a los retos que tenemos como país y el mercado pide titulados con filología catalana", afirmaba recientemente el consejero de Política Lingüística, Francesc Xavier Vila. "Con estas becas facilitamos que el talento de las nuevas generaciones pueda canalizarse hacia los estudios de lengua y literatura catalanas sin obstáculo económico alguno."

La campaña amplía su alcance

La nueva edición de la campaña "Tría Filología Catalana" mantiene la apuesta por las redes sociales y el contacto con creadores y profesionales, pero incorpora nuevos formatos como encartelamientos urbanos y un filtro promocional en TikTok e Instagram También se refuerza el vínculo con el ámbito educativo, con materiales específicos para docentes y orientadores, y una presencia más académicas.

Actualmente, las facultades de filología de una docena de universidades ofrecen estos estudios También se pueden cursar estudios de lengua y literatura catalanas en 147 universidades de todo el mundo, muchas de las cuales se integran en la Red de Estudio