La Generalitat promueve la actividad física entre todas las edades

Según la Organización Mundial de la Salud, para ser una persona activa, es necesario reducir el tiempo sedentario y entender que realizar un poco de actividad física siempre es mejor que no hacer nada. En este sentido, lo más importante es empezar con pequeñas sesiones de actividad física y aumentar gradualmente su frecuencia, intensidad y duración.

Cómo puedes moverte más en tu día a día?

Caminar todos los días 

Caminar a buen ritmo es una forma sencilla y efectiva de mantenerse activo. Hazlo todos los días: para ir al trabajo, hacer encargos, pasear por el barrio o desconectar. Caminar al menos media hora todos los días es una manera fácil de cuidarse.

Hacer ejercicio físico de forma regular

Los ejercicios cardiovasculares, de fuerza, equilibrio y estiramientos mantienen el cuerpo en forma. Algunas de las actividades diarias que nos pueden ayudar a estar mejor son: subir escaleras, llevar la compra o realizar las tareas de la casa. Además, al menos dos días a la semana, busca tiempo para practicar algún ejercicio físico que te guste, como andar deprisa, andar en bicicleta, correr, bailar, levantar pesos, hacer yoga o pilates.

Realizar actividad física en grupo

La actividad física que se realiza en compañía de familiares o amigos mejora el bienestar emocional y tiene un importante papel de cohesión e integración social. Puede practicarla todo el mundo, independientemente de su origen, género o condición. Se pueden organizar encuentros para bailar, trabajar en el huerto o en el jardín, realizar excursiones, jugar a juegos al aire libre o hacer carreras.

Apuesta por los desplazamientos a pie o en bicicleta 

Es importante priorizar los desplazamientos activos, como andar, montar en bicicleta o con patines, siempre que sea posible. También se puede realizar una parte del trayecto en transporte público y la otra, caminando.

Subir por las escaleras 

Siempre es mejor subir por las escaleras en lugar de coger el ascensor. Aumenta la fuerza muscular, mejora el equilibrio e incrementa la vitalidad. En edificios altos, combina tramos de escaleras con el ascensor.

Actividades en la naturaleza

Salir al exterior y estar en contacto con la naturaleza –sea en el bosque, en la playa, en el parque o en el jardín– tiene beneficios físicos y mentales. Cuando puedas, desconecta de los espacios cerrados y respira aire puro.

Adiós al sofá ya la silla

Si tenemos un trabajo sedentario, es necesario realizar una pausa activa de 2 a 5 minutos cada hora, aunque es mejor si la pausa activa es cada media hora, para levantarse de la silla, caminar o hacer estiramientos. Es importante evitar pasar largos ratos en el sofá. Si hablamos por teléfono, hagámoslo de pie.

Menos pantallas

Es necesario reducir el tiempo que pasamos ante las pantallas, como la televisión, el ordenador o el móvil, y dedicar el tiempo que ganamos a actividades de ocio al aire libre y en compañía.

Gestionar mejor el estrés

El estrés afecta a la calidad del sueño y la salud, en general. Realizar actividad física, sobre todo si es una actividad que nos gusta, aporta bienestar emocional y ayuda a controlar el estrés.