Tan íntima, tan abierta, tan nuestra... la casa patio

Es un cuadrado dentro de un cuadrado y todavía dentro de un cuadrado más. El del patio dentro del de la casa y esta dentro de los 21x21 metros de la parcela. En Son Serra de Marina, núcleo costero en el norte de Mallorca, con los arquitectos Vicenç Mulet (VMA) para el proyecto básico y Miquel Serra (Negreta Arquitectura) para el ejecutivo, la dirección de obra y como aparejador, ca n'Uli ofrece una imagen tan sencilla como agradable. Es sobre todo una cuestión de proporciones: cualquier medida está pensada según la proporción áurea, que por algo desde la antigüedad está considerada la más armoniosa, la más agradable a la vista. Así se diseñó esta casa patio, que dentro de la tradición mediterránea garantiza la privacidad cuando se quiere y facilita la gestión del clima.

Pero no es solo esto. A hacerla tan agradable contribuyen otros muchos factores. Contribuye una altura que es muy razonable, muy humana. Contribuye la simplicidad visual que muestra en la calle, potenciada por la composición que se forma entre el gran portón -que puede estar abierto o cerrado- y las dos barreras del murito -entrada de vehículo y entrada a pie-, la altura del cual sigue la tradición de la zona de no cerrar las propiedades más allá de hacerlo con un poyo para sentarse. Al verde de estos elementos se suma una elección cuidadosa de la vegetación tan austera como la casa de 110 m que rodea.

Y el verde es vida. Este verde tan fresco lo encontramos en ca n'Uli dentro y fuera: en la cocina, en algunos muebles y en todas las persianas. Unas persianas que son un elemento protagonista en la vivienda no solo por la presencia que les otorga su color, sino porque, junto con las cristaleras, corren a esconderse dentro de las paredes, a esconderse del todo, hasta el punto de cambiar la percepción de la casa. Cuando todo está abierto, en ca n'Uli se confunden los espacios exteriores y los interiores, y la casa se convierte en una especie de porche, con su intimidad protegida por el patio, que también se puede abrir a un lado, al otro o a los dos. Esta es una opción muy práctica para gestionar los fuertes vientos de la zona y quedar, dentro del patio y la casa, siempre a cobijo.

Dicen los propietarios que el patio también hace la función de reloj de sol. Las sombras de los muros, así como las de un carrizo que se pone en verano y se quita en invierno, marcan el paso de las horas. A un lado, una pequeña piscina con un discreto surtidor permite refrescarse con tanta intimidad como se desee.

Ca n'Uli es una vivienda sobria y alegre. Eran las condiciones del propietario: austeridad y poder gestionar la privacidad. Los arquitectos Vicenç Mulet y Miquel Serra, además, han hecho un trabajo de ahorro que contribuye a la imagen de la casa: el pavimento del patio, de piedra calcárea, reviste parte de los muros y marca la proporción más humana. En el suelo, dentro de la casa, un terrazo continuo hecho in situ reúne la tradición y la contemporaneidad.