Jennifer Aniston se rebela contra quienes la tildaron de "adicta al trabajo y egoísta" por no tener hijos

BarcelonaDetrás de la imagen blanca y de consenso que siempre proyecta Jennifer Aniston se esconde una estrella a la que no le sabe mal pisar charcos y enfangarse hasta la cintura si cree que la causa lo vale. Así claro lo ha vuelto a dejar una vez más esta semana en una entrevista que ha concedido a la edición británica de la revista Harper's Bazaar, donde nada se ha cortado a la hora de abordar temas tan delicados como la infertilidad, los problemas de salud mental o las lagunas que se esconden detrás de la palabra éxito.

La artista californiana, de 56 años, ha sido cuestionada durante décadas a escala global porque no ha sido madre. De hecho, la rumorología publicada –la que nunca debería ser publicada porque se eleva a la categoría de información cuando no lo es...– siempre señaló que el hecho de no haber tenido hijos había sido la posible causa de su divorcio de Brad Pitt, con quien se había casado en una ceremonia privada en Malibú en el año 2000 y de quien se separaba2. sirvió para cargar sobre sus hombros –de la mujer– aquella ruptura a pesar de que la realidad estaba completamente alejada de aquello. Tal y como hemos acabado sabiendo a ciencia cierta con los años, la ruptura de la pareja dorada de los primeros 2000 fue culpa no de la mujer sino del hombre, que se sintió irrefrenablemente enamorado de Angelina Jolie mientras rodaban El señor y la señora Smith.

En ese contexto, en el que repartir las culpas desde una perspectiva machista era considerado normal, Aniston fue clasificada como una adicta al trabajo que había preferido tener una carrera profesional en mayúsculas antes que darle hijos a su marido, algo que ese mundo –y en parte también el de hoy en día...– entendía como el destino lógico de cualquier mujer. Ahora, pasados ​​muchos años de todo ese revuelo, la mítica Rachel de Friends se ha quedado descansada hablando sobre la cuestión en la citada entrevista. "No conocían mi historia, ni lo que he tenido que superar durante los últimos 20 años intentando formar una familia, porque no salgo a contar mis problemas médicos", ha explicado Aniston sobre la narrativa pública en torno a ella, que opina que aunque no quiere que su vida privada sea pública a veces es bueno salir a desmentir rumores.

"Llega un punto en el que no puedes ignorar la narrativa sobre el hecho de que no tendré un hijo o que no tendré una familia. Evidentemente que a veces tengo un cierto sentido de justicia y, cuando se dice algo que no es cierto, tengo que corregir la mentira. Pero luego pienso si realmente lo tengo que hacer..." reflexiona al respecto. Aunque dice que al principio estas especulaciones sobre su no maternidad le afectaban, ahora asegura que ha logrado sobrevivir a la presión mediática. "La noticia es tan rápida, que simplemente desaparece", explica la actriz, quien lamenta que se la calificara de "adicta al trabajo egoísta" cuando iban pasando los años y no tenía hijos.

No quiso adoptar

De hecho, recientemente también se ha abierto sobre esta cuestión en el podcast Armchair experto, donde ha confesado que si no podía tener hijos biológicos prefería no tener adoptados. "La gente dice: «Pero puedes adoptar». Yo no quiero adoptarlo. Quiero mi propio ADN en una pequeña persona. Ésta es la única manera: egoísta o no, lo que sea, eso es lo que he querido", ha explicado el artista sin ahorrarse este jardín, que si bien le honra por la sinceridad también abre las puertas a un debate que fácilmente puede derivar en polémica para ella. "Es muy emotivo el momento en que te dicen «esto es todo». Porque hay un momento en que esto ocurre... –añade la actriz, que concluye–: "Llega un punto en el que esto ya está fuera de tu control. Ya no hay nada que puedas hacer".

Aniston ha hecho todo éste striptease emocional en un momento muy dulce de su carrera profesional. Después de haber sido exitosa en varias etapas de su vida como actriz, se encuentra ahora en un punto de madurez en el que ha sabido dar otros pasos dentro del mundo del espectáculo. La serie The morning show de AppleTV está en la cuarta temporada con ella y Reese Witherspoon como protagonistas. Porque esta serie exitosa y aplaudida por la crítica no es sólo un trabajo más, también marca un punto de inflexión en su carrera como productora ejecutiva junto a su amiga Reese, que hizo de su hermana a Friends.

Mientras sigue recogiendo los logros que le ha dado este show que le ha puesto a prueba delante y detrás de las cámaras simultáneamente, Aniston parece en paz con el calvario privado y público que le ha tocado vivir. No bastaba con querer tener hijos no pudiera tener que encima le ha tocado aguantar las opiniones poco informadas de cualquier desaprensivo que hable a la ligera sobre un tema tan sensible. Sin embargo, resulta evidente que el impacto de las palabras que le llegan de fuera es cada vez menor y que esta reconocida actriz de sitcom está decidida a dejar de luchar contra lo que se dice de ella por simplemente ser ella misma quien escriba su destino. Dejar de ser explicada por su pasado para ser explicada por su presente y, por supuesto, por su futuro.