El subdelegado del gobierno español enamorado de un explorador noruego

GeronaNo es habitual que en la presentación de un libro en Girona no quepa ni una aguja –se harían cruces de las que suman máximo cinco personas– pese a hacerse en un salón de actos. Y mucho menos que se acumulen decenas de personas fuera. Pero tampoco es habitual que un ex director de instituto de pueblo, profesor, crítico de arte, gestor cultural y doctor en historia del arte por una tesis sobre arte fantástico, sea el subdelegado del gobierno español en Girona y que presente un libro sobre un explorador noruego. Pere Parramon (Girona, 1977) acaba de publicar Fridtjof Nansen. Retratos, impresiones (SD Edicions), un breve libro de ensayo con una gran vocación poética que repasa, a partir de diferentes imágenes y dibujos de este premio Nobel de la Paz de 1922, la vocación universal del personaje. Un libro que nace del "enamoramiento" de Parramon hacia esta figura "de hombre universalispero que, lejos de querer "idealizar" o "glorificar" a Fridtjof Nansen (Noruega, 1860-1930), lo que busca sobre todo es presentarlo como un "ser humano" para aprender de su legado.

El libro es una oportunidad para conocer el mundo pequeño de un subdelegado del gobierno español atípico de Girona, puesto que es recién llegado en política. Tándem de la ahora consejera Silvia Paneque en las elecciones municipales en la ciudad en el 2023 como número 2, hace un año accedió al cargo en sustitución de Albert Bramon, que se jubiló. En su toma de posesión hubo una gran ausencia: la del alcalde, Lluc Salellas. También es el primer secretario de la agrupación del PSC.

El 'Fram'

El particular enamoramiento de Parramon hacia Nansen nació en el 2010 durante un viaje a Oslo, cuando visitó el Museu del Fram, dedicado al barco construido en 1892 y que sirvió para una expedición que tenía como objetivo el polo Norte. No llegaron, pero el Fram todavía ostenta el récord de haber sido el barco de madera a una latitud más alta y de haber llegado al polo Sur. "A diferencia de los barcos anteriores, el Fram había sido diseñado no para luchar contra la naturaleza, sino para vivir en comunión", reflexiona el crítico de arte y escritor. Con un buque redondo, no buscaba romper el hielo sino que se dejaba atrapar para que fueran las corrientes las que lo transportaran hacia los polos. "Fue a partir del barco que descubrí la figura tan polifacética de Nansen y fui a detallar. de un personaje profundamente nacionalista en sus inicios –fue uno de los impulsores de la creación del estado noruego–, pero que a su juicio con el tiempo "dio una vuelta y se dio cuenta de que su trabajo trascendía la bandera". ayudado a 50 millones de personas en el mundo.

Cultura y educación

"Él, desde el amor por su pueblo y por la patria, es capaz de desarrollar el amor por la humanidad –analiza Parramon–. Las fronteras nacionales dejan de tener peso. Nansen es una de las figuras que avanzan en el camino de lo que será la ONU". Desde esta premisa, el escritor realiza un paralelismo con su forma de entender la política: "Reivindicar la mirada amplia que implica consensos, porque la democracia es diversidad". Como el barco Fram, entiendo que Parramon entró en política para que lo que más ama, la cultura y la educación, formara parte de una esfera donde demasiado a menudo son olvidadas. Dejarse atrapar por el hielo para poder conseguir sus propósitos. "No es solo el respeto a la cultura como subdelegado –es un habitual en todas las presentaciones y lleva exposiciones a la subdelegación–, sino que pienso, siento y decido desde la cultura. Es mi espacio natural".

Servicio al resto

Como la de Nansen, su carrera ha sido meteórica: en 2023 entraba directamente como número dos en la lista de las municipales y un año después ya era subdelegado del gobierno español. Todo empezó con la amistad con Paneque, que presentó su libro en Girona en un acto en el aula magna de la Casa de Cultura con el artista y profesor Jordi Armengol que unió a diferentes mundos, pero en el que sobre todo había simpatizantes del PSC. "Paneque me dijo una vez que estar al servicio del resto engancha", recuerda Parramon, quien considera que Nansen, pese a "el ego de juventud", con el tiempo se dio cuenta de que "estaba al servicio primero de su país y después de la humanidad". Explica que "la importancia de la cultura y la educación como elementos fundamentales para mejorar la sociedad" fue en su caso lo que le llevó a dar el paso. "Es raro que un doctor en historia del arte y crítico de arte se dedique a esta tarea: habría que reivindicarlo más", dice.

La diversidad

La carrera de Parramon, también al igual que Nansen, no ha sido sólo meteórica en política. Cuando terminó de estudiar historia del arte empezó a ser becario en la Fundación Vila Casas, donde pasó enseguida a coordinar exposiciones. "Pero me llamaba la docencia y decidí realizar un cambio radical", dice. Fue así como hizo las oposiciones de secundaria sin ser interino y acabó dirigiendo el Instituto Rafael Campalans de Anglès, una tarea que compaginó con el doctorado y con clases en la UdG. Después de escribir dos novelas en catalán, señala que el último libro está en castellano, en parte, para ponerse "a prueba", pero también como homenaje a su madre, de origen extremeño: "Yo pienso en catalán, pero con ella siempre he hablado en castellano. Para mí la política debería ser el arte de saber encontrar consensos a través de la diversidad –concluimos con la diversidad –concluimos a la diversidad- partidismo y sectarismo, en el peor de los casos".