Estados Unidos

Michelle Obama: "Hubo 10 años en los que no podía soportar a mi marido"

La ex primera dama confiesa que cuando las niñas eran pequeñas, las tareas domésticas "no estaban equilibradas"

Sònia Sánchez
y Sònia Sánchez

BarcelonaLa ex primera dama y una de las mujeres más influyentes de Estados Unidos, Michelle Obama, ha decidido sincerarse sobre su matrimonio y ha confesado que hubo 10 años en los que "no podía soportar" a su marido, el expresidente Barack Obama, porque no cooperaba de manera justa en la crianza de sus hijas. "La gente cree que soy mala cuando digo esto: «Hubo 10 años en los que no podía soportar a mi marido». Y adivina cuándo fueron esos años: cuando las niñas eran pequeñas", ha explicado en un programa de la televisión Revolt TV, donde debatía en una mesa con varias mujeres para presentar su nuevo libro.

Michelle Obama hablaba de la gran cantidad de "trabajo que conlleva un matrimonio, incluso cuando estás locamente enamorado". "Pero yo acepto 10 años malos dentro de los 30, la gente se rinde en estos años", argumentaba. Unos años malos en los que, según explicó la ex primera dama, parece que el expresidente no compartía de manera equitativa el trabajo que supone criar a dos niñas pequeñas.

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"Cuando te acabas de casar dices: «Hola, ¿dónde vas? ¿De viaje? ¡Pásatelo muy bien, amor!», pero cuando tienes niños pequeños es más bien: «¿Dónde dices que vas?» Y empiezas a medir cosas como «¿Cuántos pañales has cambiado tú?», «Oh, ¿has ido al golf? ¿Has tenido tiempo de ir a jugar a golf?» o «¿Por qué estás todo el día en el gimnasio?»" "Durante diez años en los que intentábamos levantar nuestras carreras y a la vez criar a dos niñas yo estaba: «¡Esto no es justo!»"

Obama revelaba así que el expresidente no fue un padre ejemplar, al menos durante los primeros años de vida de sus dos hijas, Malia y Sasha. En realidad, lo que intentaba argumentar es que hacer funcionar un matrimonio requiere mucho esfuerzo e incluso aguantar ciertas cosas: "Tienes que conocer bien al otro, que te guste: «No soy feliz contigo, pero te respeto; no estoy de acuerdo contigo, pero eres una persona amable e inteligente»", alegaba, y se quejaba de que mucha gente "abandona" el matrimonio en el momento en el que se pierde la emoción.