Un zoo de Dinamarca disecciona a una leona en directo para enseñar anatomía a los niños
El Zoo de Odense ha retomado las disecciones de animales después de las restricciones anticovid
BarcelonaUna vez levantadas todas las restricciones antipandemia, el zoo de la ciudad danesa de Odense retomó el pasado domingo una de sus actividades históricas, la disección pública de un animal. Decenas de familias se reunieron en círculo para asistir al examen de la anatomía de una leona de 140 kilos, Zola. El zoo organiza este tipo de exhibiciones desde hace más de 20 años como parte de sus actividades educativas, especialmente dirigidas a los niños.
"Queremos comunicar sobre los animales de diferentes maneras. A veces utilizamos los que están muertos y así podemos mostrar cómo son los órganos, en este caso, de un león", explicaba a la televisión danesa TV2 Nina Collatz, zoóloga y subdirectora del Zoo de Odense. "La leona ya estaba muerta. Podríamos deshacernos directamente de ella, pero hay opciones de aprendizaje, por eso la diseccionamos", añadía el consejero delegado, Bjarne Klausen. Él mismo es quien condujo la exhibición, primero mostrando partes externas de la leona, como las zarpas y los colmillos, y después, los órganos internos como el corazón y las tripas.
"Creo que es emocionante ver cómo son los animales por dentro. Es guay ver cómo diseccionan a un león", decía a la misma cadena Vilma Leicht von Huth, una niña de siete años, que destacaba que lo que más le había impresionado había sido "ver cómo es de grande el corazón" de estos felinos. Además de ver los órganos internos, la audiencia también tiene la oportunidad de tocarlos. Los responsables también les dan información, por ejemplo, sobre cómo los leones utilizan la garganta para rugir. "Para los zoólogos, se trata de enseñar a niños y adultos sobre la vida y la muerte de los animales", afirma Klausen.
Polémica internacional
En 2015 la disección de otra leona también en Odense levantó polémica, sobre todo por la repercusión internacional que tuvo la noticia. El año anterior había pasado lo mismo en el Zoo de Copenhague, en aquel caso con una jirafa, Marius, que tenía dos años y que estaba sano, pero al que decidieron sacrificar para reducir el riesgo de endogamia. En aquel momento Collatz explicó en The New York Times que, mientras que otros países como Estados Unidos utilizan la contracepción para controlar el número de animales, muchos zoos de Dinamarca y otros países europeos consideran que es mejor permitir que los animales se reproduzcan y expresen sus instintos naturales, aunque esto signifique matar a parte de la descendencia, como último recurso, por razones de conservación.
"A los daneses no nos sorprende y la gente de Fionia [la isla donde se sitúa Odense] está acostumbrada a estas disecciones. En Estados Unidos y en muchos países de Europa, los animales no se pueden diseccionar, de forma que es una cosa especial que en Dinamarca y los otros países nórdicos lo podamos hacer", afirma la subdirectora del Zoo de Odense.
Ninguno de los animales de los zoos daneses se matan expresamente para las disecciones, pero –cómo evidencia el caso de Marius– tampoco todos mueren de manera natural. La leona Zola llegó al Zoo de Odense en 2011 y los responsables de la instalación la mataron en 2019. Después de luchas internas con otros leones de la mandada, la tuvieron que separar. Al no poder venderla a otros zoos, decidieron sacrificarla, así como a dos leones más. "Si no, se hubieran acabado matando todos los unos a los otros", explica Bjarne Klausen. "Tienen una buena vida en el zoo, pero nosotros decidimos si los animales tienen que vivir o morir", sostiene Nina Collatz.
Desde entonces Zola se había mantenido congelada, igual que otros animales que han muerto los últimos meses y que próximamente también serán diseccionados. La próximo será otra leona, en una exhibición organizada para principios de junio.