Los Juegos menos vistos (y nueve claves más de las audiencias olímpicas)
BarcelonaCada Juegos Olímpicos, desde 1992 –los primeros medidos con el sistema de audímetros en España–, han tenido menos audiencia televisiva que los anteriores. Tokyo no ha sido una excepción. Estos son los principales datos, en cuanto al consumo mediático de estas dos semanas de oros, platas y bronces.
Los catalanes que han conectado alguna vez con los Juegos
Más de la mitad de los catalanes han visto, como mínimo, un minuto de los Juegos Olímpicos. Concretamente, el 57,2% de los espectadores de más de 4 años, que son los que miden los audímetros. En total, 4,2 millones de espectadores acumulados a lo largo de las dos semanas de pruebas deportivas. En España el seguimiento ha sido más grande todavía: el 66% de la población ha conectado, es decir, 30,3 millones de televidentes.
Las emisiones diferentes que se han podido ver
El balance televisivo de Tokyo habla de más de 1.600 horas de pantalla para un total de 1.857 emisiones diferentes, entre todos los canales. En total, se han tratado 19 categorías deportivas.
La cuota conjunta de los Juegos
Las cinco cadenas que han ofrecido los Juegos en España (La 1, La 2, Teledeporte, Eurosport 1 y Eurosport 2) han sumado un 14,6% de share durante el periodo de los Juegos Olímpicos. Esto equivale a caer 4,5 puntos respecto a la anterior celebración, en Río de Janeiro, en 2016. Barcelona marcó el máximo, con una cuota del 52,1%, en unos tiempos en los que no había la presente fragmentación televisiva en abierto ni internet.
El porcentaje de aumento del 'share' de los canales que ofrecían los Juegos
Si se comparan los datos de audiencia de los canales con Juegos Olímpicos respecto al mismo periodo del año anterior, se constata que mejoran la audiencia en un 52% de media. Pero la alegría va por barrios y, en el caso de La 1, que ha sido la cadena más seguida, la mejora es solo de un 21%, puesto que pasa de un share del 8,9% a uno del 10,8%. Los Juegos Olímpicos le han costado 50 millones de euros a RTVE, que se justifican más por el prestigio que da poderlos ofrecer y ser televisión de referencia que por el incremento neto de audiencia.
El porcentaje de espectadores de 25 a 44 años, el más bajo de la historia
La franja de edad de 25 a 44 años ya no mira los Juegos por televisión convencional. Si cuatro años atrás representaban el 25,5% de los espectadores, en esta ocasión ya solo son el 19,1%. En cambio, la franja entre 45 y 64 años sigue subiendo y ya es el 41,7% de todos los consumos televisivos olímpicos. En Barcelona 92 solo representaron el 26,3%. Estos han sido, también, los Juegos más masculinos: un 61,9% de los espectadores eran hombres. Los de 2012, en Londres, fueron los más equilibrados, con una audiencia masculina del 57,3%.
El récord de audiencia de Tokyo 2021, con el fútbol
La prórroga de la final de fútbol masculino entre España y Brasil fue la emisión más vista de todos los Juegos, con una audiencia media de 696.000 espectadores en Catalunya y una cuota de pantalla del 39,8%. Son datos inferiores a los españoles, donde marcó 5.214.000 espectadores y un share del 44,9%. El deporte rey copa ocho de las diez emisiones más seguidas en España y solo deja lugar para la octava posición conseguida por el atletismo (con motivo de las pruebas en las que recibieron medalla Ana Peleteiro y Ray Zapata), que se saldó con 1.868.000 seguidores y un 26,5% de share, y a una décima posición donde está el España-Argentina masculino de baloncesto, que congregó a 1.721.000 españoles, un 17% de los que a esa hora miraban la televisión. En cambio, en Cataluña solo el waterpolo entre Serbia y España rompió el dominio del fútbol, al conseguir ser la novena emisión más vista, con 251.000 espectadores.
Los espectadores en España de la emisión más seguida en la televisión de pago
El fútbol domina el ranking de la televisión en abierto, pero en el pago hay más disciplinas: en el top10 hay, por orden, atletismo, bádminton, lucha, baloncesto, fútbol y gimnasia artística. La emisión más vista fue la correspondiente a la jornada del 1 de agosto de atletismo, en la que los medallistas Ana Peleteiro y Ray Zapata compitieron y que se saldó con 177.000 espectadores de media (38.000 de los cuales en Catalunya). La participación de atletas españoles va muy ligada al seguimiento, como era de esperar, pero el bádminton corresponde a la final entre China y Taiwán, y el baloncesto al partido entre Francia y los Estados Unidos.
Los millones que ha pagado Discovery para llevar pruebas al cerrado
Los organizadores de los Juegos vendieron al canal americano Discovery un paquete de 1.085 millones de euros que le permitía colocar algunas pruebas en sus canales de pago. A pesar de que los Juegos han sido tradicionalmente en Europa patrimonio de las televisiones públicas, en esta ocasión un grueso significativo de las pruebas en países como Noruega y Suecia solo se han podido seguir por el pago. La BBC también ha ofrecido menos pruebas que nunca, así que habrá que ver si esto marca una tendencia en el conjunto del continente.
Millones de reproducciones en TikTok del vídeo de las camas de cartón
Estos han sido los primeros Juegos de TikTok: las cuentas de los atletas permitían ver entre bambalinas una perspectiva diferente de Tokyo 2021. La línea es delicada, porque los organizadores alientan a que los deportistas compartan pedazos de su vida para aumentar el interés por la competición. Eso sí, si alguien colgaba imágenes suyas compitiendo, automáticamente se le suspendía la cuenta por violación de copyright, puesto que se quería aprovechar la viralidad de las redes pero sin violentar las televisiones que, al fin y al cabo, son las que pagan la fiesta. Uno de los vídeos más vistos, con 7,5 millones de reproducciones, fue el de la jugadora de rugby Ilona Maher, poniendo a prueba las camas con base de cartón pensadas para disuadir a los participantes de incurrir en actividades lúbricas poco responsables con el covid.
Los dólares pagados por la NBC por seis Juegos Olímpicos
El canal NBC ha amarrado los Juegos Olímpicos del periodo 2022-2032 –seis en total, puesto que incluyen los de verano y los de invierno– por una astronómica cifra de 7.750 millones de dólares. A pesar de que los analistas consideran que la factura publicitaria asociada puede llegar fácilmente a los 1.000 millones de dólares por edición, la tendencia de los espectadores a buscar otras ventanas hace pensar que se trata de una inversión arriesgada, puesto que en los próximos once años el panorama audiovisual seguirá viviendo una profunda transformación.
