Seis series árticas (y una antártica) para intentar burlar el calor

BarcelonaSi estás sufriendo la canícula sin aire acondicionado o con frigorías insuficientes, te proponemos intentar combatirla por autosugestión. Aquí tienes un listado de siete series hermanadas por tener como escenario lugares gélidos. Quizás la abundancia de paisajes nevados no consigue obrar el milagro de rebajar la sensación de temperatura, pero al menos tendrás al alcance unas horas de evasión a un precio más barato que un vuelo a Nuuk, Groenlandia.

Fortitude es un pueblecito (ficticio) situado en un archipiélago a medio camino entre la costa norte noruega y el polo. Nunca ocurre casi nada hasta que un asesinato perturba la proverbial paz de esa comunidad, habitada sobre todo por científicos de todo el mundo. A lo largo de tres temporadas, el espectador descubre que ese crimen es solo la punta del iceberg de una situación mucho más compleja y que involucra a unos parásitos capaces de convertir en hiperagresivas a las personas que infectan. Factura británica para un thriller que incluye en el elenco nombres célebres como Dennis Quaid, Michael Gambon, Stanley Tucci o Verónica Echegui.

Sir John Franklin capitaneó una expedición de la Royal Navy británica para averiguar si existía lo que acabaría siendo conocido como Paso del Noroeste, una manera de bordear el océano Ártico por encima de Canadá y hasta Inglaterra. La misión desapareció y Dan Simmons quiso especular sobre cuál fue su destino en la novela The terror. La adaptación televisiva de este superventas está liderada, en la parte interpretativa, por Jared Harris (Mad men, Chernobyl), acompañado por Tobias Menzies y Paul Ready, y se basa en la premisa de una presencia sobrenatural que complica la supervivencia de una tripulación ya exhausta y febril. Hay una segunda temporada pero desconectada de la primera y que recibió críticas no tan entusiastas.

Aunque las series árticas son fecundas en crímenes y misterios paranormales, también existe lugar para el costumbrismo e, incluso, la reflexión filosófica. Durante muchos años, Doctor en Alaska estaba ausente de las plataformas, un gran agravio seriófilo: las desventuras de este doctor de Nueva York trasladado contra su voluntad al pueblo de Cicely siguen el esquema clásico del recién llegado que debe adaptarse a un entorno ajeno hasta que acaba abrazándolo. Pero la serie de Joshua Brand y John Falsey tenía una fórmula única que la convirtió en una serie de culto en la década de los noventa, gracias a su combinación de excentricidad, humor amable, poesía, personajes carismáticos y renos.

Otra misión marítima del siglo XIX, sin monstruos, más allá de los humanos. Una expedición al ártico resulta abortada cuando el barco se hunde (saboteado, para cobrar un seguro). Se supone que se trataba de un naufragio controlado, pero cuando la nave de rescate no aparece, la situación se convierte en una lucha por la supervivencia extremadamente cruel. El protagonista es un cirujano que esconde un secreto del pasado. No solo tendrá que hacer frente a los elementos, sino también a Drax, un arponero violento. Esta miniserie de cinco episodios cuenta con algunos actores de carácter reputados, como Colin Farrell, Stephen Graham o Peter Mullan.

Reality de Netflix, con reglas inquietantemente poco claras, al estilo de Supervivientes, solo que cambiando los bikinis por anoraks gruesos y las playas del paraíso por los bosques helados de Alaska. Dieciséis concursantes, agrupados en equipos de cuatro personas, deben conseguir sobrevivir al máximo dentro del programa antes de retirarse voluntariamente o ser eliminados por motivos médicos. Como es habitual, el programa explota las rivalidades entre personajes de personalidad fuerte, no especialmente dotados para el trabajo en equipo. La plataforma ya la ha renovado para una segunda temporada después de los ocho episodios iniciales, con los que ha conquistado buenas cifras de audiencia.

Un nordic noir islandés de manual, con uno de sus iconos interpretativos: Ólafur Darri Olafsson. El protagonista es un jefe de policía en un pueblecito remoto del país que debe resolver la aparición de un cadáver mutilado, recuperado por los pescadores locales. La investigación se complica cuando el pueblo queda aislado y algunos de los personajes comienzan a comportarse de forma impetuosa. Paisajes de un blanco opresivo y música del ganador de un Globo de Oro Jóhann Jóhansson, en su momento –en 2015– fue la serie más cara que había producida nunca Islandia. Debutó en el Festival Internacional de Cine de Toronto y recibió muy buenas críticas. Ha habido otras dos temporadas, la tercera de las cuales abandona la nieve en favor de la roca negra volcánica.

La mayoría de ficciones glaciares tiran hacia el norte. Una de las excepciones antárticas es The head, producida por The Mediapro Studio, que examina el aislamiento extremo, en este caso en el polo sur. Un grupo de científicos que lucha contra el cambio climático pasa los seis meses de oscuridad en su base. Cuando llega el relevo en primavera, comprueban horrorizados que el personal o bien ha muerto o ha desaparecido. Y ven que hay un asesino en libertad en un entorno en el que no hay precisamente muchas opciones de esconderse o huir. Este thriller psicológico transporta ecos intensos de Agatha Christie y está creado por los hermanos Pastor, con Jordi Galceran como coguionista.