Netflix vuelve a subir precios en medio de una facturación récord: esto es lo que costará ahora la suscripción

BarcelonaCuando en febrero de 2023 Netflix prohibió compartir cuentas muchos usuarios escribieron mensajes encendidos en redes sociales asegurando que se darían de baja y que la plataforma se arrepentiría de haber limitado la libertad de los suscriptores. La realidad ha sido muy distinta. Si bien inicialmente hubo un pequeño éxodo, Netflix sigue creciendo, como demuestran los resultados del tercer trimestre de la plataforma: el servicio de estríming ha sumado 5,1 millones de suscriptores respecto al trimestre anterior. El dato superó las previsiones de los analistas de Wall Street, que habían calculado un crecimiento de 4,52 millones de suscriptores. La última previsión de facturación para 2024 sitúa a la compañía en 38.900 millones de dólares y se cree que en 2025 alcanzará más de 43.000 millones.

En plena euforia por los buenos resultados, Netflix acaba de hacer efectiva una nueva subida de los precios de suscripción en España. Tal y como puede verse en su página, la compañía ha implementado un incremento de entre uno y dos euros según el plan de suscripción. Así, la tarifa estándar pasa de costar 12,99 euros al mes a 13,99 euros, mientras que el premio ahora tiene un coste de 19,99 euros (antes eran 17,99). Además, por cada suscriptor extra será necesario pagar 5,99 euros al mes.

Otra de las tarifas que cambia de precio es el estándar con anuncios, que pasa de 5,49 euros al mes a 6,99 euros. La decisión de crear un plan de suscripción más barato gracias a la inclusión de publicidad fue tan polémica como la de eliminar las cuentas compartidas, pero también fue fructífera. Además, ha terminado marcando tendencia en el sector: casi todas las plataformas ofrecen tarifas baratas que incluyen el peaje de ver anuncios antes o durante una película o capítulo de una serie. En Netflix el modelo con anuncios empezó a implementarse hace casi dos años, primero en una docena de países y después de forma generalizada. Los resultados fueron positivos y, según ha explicado la compañía en una carta a los accionistas, un 50% de las altas del tercer trimestre han optado por la tarifa con anuncios. Además, aseguran que los planes de suscripción con anuncios experimentaron un crecimiento del 35% de un trimestre a otro.

Pese a los buenos resultados, la empresa ha querido rebajar una posible euforia y en la carta ha asegurado que todavía es pronto para sacar conclusiones del modelo con anuncios. "Como dijimos el trimestre pasado, hace falta tiempo para generar un nuevo flujo de ingresos y no esperamos que los anuncios sean el principal motor de crecimiento de nuestros ingresos en 2025. El reto a corto plazo (y la oportunidad a medio plazo) es ampliar más rápidamente nuestra capacidad de monetizar nuestro inventario de anuncios en crecimiento”, dice la compañía. Sin embargo, la situación de Netflix es mejor ahora que en mayo del 2022, cuando la empresa anunció que por primera vez en una década había perdido suscriptores. Desde ese momento bajo, la empresa ha remontado sin desfallecer y ha logrado sobreponerse a la competencia de los otros servicios de estríming. La compañía de Ted Sarandos es la plataforma líder en el mundo, con más de 280 millones de suscriptores.

Pese a los buenos datos del trimestre, Netflix ha avanzado que a partir de 2025 ya no compartirá con los accionistas la actualización del número de suscriptores porque asegura que se centrará en otros conceptos y factores como los ingresos y otras métricas financieras.

Más cantidad que calidad

La posición de líder de Netflix es indiscutible, pero la cosa cambia cuando se trata de la valoración cualitativa de sus proyectos. En los últimos premios Emmy, la plataforma logró llevarse galardones en las categorías de miniserie porque competía con la británica Mi reno de peluche, una producción arriesgada que se aleja bastante de los productos más convencionales por los que suele apostar. En cambio, su presencia era más residual en la categoría de drama, donde obtuvo nominaciones por The Crown, con una última temporada mucho menos exitosa que las anteriores, y El problema de los tres cuerpos, la nueva serie de los creadores de Juego de truenos que no ha terminado de ser el gran fenómeno que se esperaba.

En realidad, las series de mayor éxito de la plataforma son, salvo algunos casos contados, las más mainstream y menos alabadas por la crítica, tales como Los Bridgerton y Miércoles. En el tercer trimestre de 2024 la situación se ha repetido: los títulos que mejor rendimiento le han dado son La pareja perfecta, destrozada por la prensa especializada, Emily en París y Nadie quiere esto.

Con mayor o menor calidad, Netflix sigue siendo la líder en un sector que parece no tener muy claro hacia dónde tirar para poder cuadrar los números. Una de las vías para sobrevivir es aunar fuerzas entre plataformas. El último ejemplo de esta estrategia es el acuerdo que han firmado Amazon y AppleTV+ para que los suscriptores de la primera tengan acceso a los contenidos de la segunda pagando 9,99 dólares al mes (la misma tarifa que pagan los usuarios cuando se suscriben directamente al servicio de Apple). Quien sale a ganar con esta asociación es la compañía fundada por Steve Jobs, que, pese a tener una producción de series de gran calidad, está muy por detrás de las otras plataformas en cuanto al número de suscriptores y capacidad de retención.