Laboral

Desconvocada 'in extremis' la huelga de seguridad que afectaba al aeropuerto de El Prat

Los vigilantes consiguen pluses por idiomas y bajo absentismo y retiran la convocatoria de paros

Movimiento de viajeros en el aeropuerto de El Prat.
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BarcelonaLos vigilantes de seguridad del aeropuerto de El Prat llegaron a un acuerdo con la empresa y desconvocaron la huelga que debía empezar este jueves. El comité de empresa y la dirección de la compañía de los Países Bajos I-Sec han cerrado este pacto de madrugada, después de 15 horas reunidos y de la mediación del departamento de Trabajo de la Generalitat. El objetivo de la huelga, que debía empezar el 10 de agosto con paros todos los lunes, jueves, viernes, sábados y domingos en tres franjas horarias, era conseguir mejoras sociales para la plantilla, que se muestra satisfecha con las mejoras logradas .

La empresa se ha comprometido a pagar parte de los pluses salariales que pedían los trabajadores. Por ejemplo, se ofrecerá un "premio de asistencia" de 20 euros mensuales a los vigilantes de seguridad que no hayan pedido ninguna baja médica en los meses de septiembre, octubre y noviembre de 2023. I-Sec seguirá pagando este complemento, o el incrementará en algunos casos hasta 40 euros, si se consigue reducir la tasa de absentismo laboral y situarla entre el 7% y el 10%.

La compañía también ha aceptado recompensar con un plus de idiomas los conocimientos de inglés de los vigilantes. Esta paga sería de 20 euros mensuales para quienes superen una prueba inicial de nivel, y de 35 euros para quienes presenten una titulación oficial equivalente al nivel A1.

Más mujeres en plantilla

Además, los sindicatos habían denunciado la discriminación que sufren las trabajadoras en el colectivo de vigilantes de seguridad. En este punto, I-Sec asegura que "hará los máximos esfuerzos para conseguir la paridad" y contratar a más empleadas antes del 1 de noviembre de 2023. Además, se compromete a reubicar a las embarazadas a tareas administrativas, por lo que no deban asumir trabajos físicos.

También ha habido acuerdo con respecto a los descansos: los trabajadores con contrato de ocho horas tendrán una pausa principal de 30 minutos, sumada a dos complementarias de 10 minutos cada una. Aun así, los sindicatos no han logrado arañar ningún pacto en cuanto al pago del aparcamiento, aunque la plantilla denuncia el coste que supone para los vigilantes aparcar su coche particular en el aeropuerto.

La convocatoria de huelga de los vigilantes de seguridad de I-Sec, con una plantilla de unas 500 personas, recordó otros conflictos laborales en el aeropuerto de El Prat, como el colapso que dejó el paro de los trabajadores de Eulen en el verano del 2017.

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