El miedo es la fuerza motriz, el principio de todas las cosas. De modo que, ante todo, hay que poner en marcha la máquina del miedo: "Europa está a punto de desaparecer como civilización".
El miedo es esencial para dar el siguiente paso, que es el chantaje. Consiste en decir que si tu país quiere seguir cobijándose bajo el paraguas militar de Estados Unidos deberá aumentar su gasto en defensa hasta el 5% del PIB. Que esto signifique gastar miles de millones en armas fabricadas en Estados Unidos no debe parecer importante.
Pero si, pese a todo, aún aguantas el miedo y resistas el chantaje, vendrán a destruirte la autoestima: "Los dirigentes europeos son débiles, porque son políticamente correctos y no saben qué hacer". Por eso es necesario apoyar a líderes europeos de extrema derecha, que son los únicos con los que valdría la pena mantener la alianza transatlántica.
El manual del maltrato aconseja, finalmente, hacerte sentir culpable. Por ejemplo, culpable de regular la industria tecnológica estadounidense en Europa y hacerle pagar multas por sus malas praxis. Entonces, el departamento de Estado dirá que Estados Unidos no puede hacer ver durante más tiempo que son socios de la Unión Europea "si adopta políticas contrarias a los intereses americanos". Él quiere ser tu amigo. Eres tú que no quieres y le obligas a castigarte.
Eres débil, acuérdalo. Y con él serás fuerte. ¿Qué importancia puede tener que para hacerlo contento tengas que tirar por el fregadero los derechos humanos, el estado de derecho, el estado de bienestar y la cooperación internacional? Esto no son sino debilidades de la gente que todavía no ha entendido que hemos venido a este mundo a morder.
