¿Es necesario que nos lo digan más claro? El referente de Trump en España es Vox. En medio de amenazas de chuleta, de mentiras kilométricas y de exhibición de motosierras, la persona a la que saludó por el nombre el presidente de Estados Unidos durante el siniestro festival de la extrema derecha mundial reunida en Washington, fue Abascal. Al igual que el referente de Trump, Vance y Musk en Alemania es Alternativa para Alemania, el partido xenófobo que ayer votaron uno de cada cinco electores alemanes.
En un análisis impecable nada más saberse los resultados de los primeros sondeos, el corresponsal de TV3 en Berlín, Oriol Serra, hizo notar que el histórico aumento de participación que ha habido este domingo demuestra, también, que los alemanes que no querían extrema derecha se movilizaron. Habló de Alemania que no funciona como fuente de malestar social y de los trenes como metáfora de un país que ha dejado de funcionar como un reloj desde el momento en que se cayó la inversión en mantenimiento y el servicio ferroviario empezó a ser cada vez más impuntual.
En Cataluña, en este cuarto de siglo hemos pasado de 6 a 8 millones de habitantes. Es imposible que la sanidad no haga esperar, que la educación en catalán y de calidad llegue a todo el mundo, que las universidades sean punteras o que las infraestructuras eviten el colapso diario de movilidad si no estamos financiados de acuerdo con nuestro esfuerzo fiscal y necesidades multiplicadas en poco tiempo. Que se lo apunte el Gobierno cuando negocie la financiación: cuando un país funciona aleja la tentación del fascismo. A las mentiras del odio no se les puede dar ni la más mínima excusa.
