La Agencia Tributaria abre una inspección al emérito para comprobar si ha cumplido con Hacienda

MadridLa Agencia Tributaria ha notificado a Juan Carlos I el inicio de una inspección para verificar el cumplimiento de sus obligaciones fiscales, según ha publicado El Español. Hasta ahora había hecho comprobaciones sobre la regularización fiscal que el rey emérito hizo en febrero. En concreto, presentó una declaración complementaria de autoliquidaciones por el dinero que recibió de la Fundación Zagatka de 8 millones de euros y liquidó una deuda con Hacienda de 4.395.901,96 euros. La administración tributaria todavía no ha dado el visto bueno a esta regularización y ahora ha pedido más información sobre los pagos asumidos por la Fundación Zagatka, así como datos sobre cuentas, tarjetas y patrimonio. Ahora el rey emérito tiene que responder al requerimiento de información, según señala el digital.

Fuentes de Hacienda no confirman la información pero recuerdan que ya se puntualizó que se harían las comprobaciones oportunas respecto a la regularización del emérito. En febrero la Agencia Tributaria fue duramente criticada por lo que podría ser una inacción perpetuada de investigación y de fiscalización de las cuentas y negocios del rey emérito a pesar del goteo de informaciones. ¿Cómo podía ser que le hubiera pasado por alto la regularización y ahora la pudiera hacer sin tener que enfrentarse a un delito fiscal?

Ahora se busca saber si la Fundación Zagatka, propiedad del primo del emérito Álvaro de Orleans-Borbón, era en realidad una entidad pantalla utilizada por el monarca para desvincularse formalmente del dinero que usó para poder financiar los viajes por todo el mundo. Zagatka abonó durante 12 años, hasta el 2018, gastos del emérito por valor de 11 millones de euros. Como por ejemplo jets privados en los países del Golfo –actualmente Juan Carlos I reside en los Emiratos Árabes Unidos– y en el Caribe.

Las investigaciones paralelas de la Fiscalía

La Agencia Tributaria de momento no ha dado el aval a la doble regulación complementaria de Juan Carlos I, que la hizo con la pretensión de poder volver a España pero que también se interpretó como una manera de admitir que había cometido un delito fiscal. Ahora bien, la regularización en si no es un delito, siempre que se haga en tiempo y forma correctas. El caso es que Hacienda ahora da un paso más en el procedimiento de inspección pidiendo más información de Zagatka, así como también otros datos como cuentas del rey emérito, tarjetas utilizadas y de otro patrimonio, mientras siguen las diferentes vías de investigación abiertas por la Fiscalía del Supremo. El objetivo de la Agencia Tributaria es indagar sobre hechos con relevancia tributaria que no fueran declarados o se hubieran declarado de manera incorrecta.

Juan Carlos I tiene que responder a la información que se le ha pedido desde Hacienda, pero este paso no mejora la situación para que vuelva a España desde Abu Dabi. También es necesaria la respuesta del ministerio fiscal a las tres investigaciones en curso: una por la fortuna oculta en Suiza, otra por un fondo en la isla de Jersey –un paraíso fiscal– y finalmente sobre las tarjetas opacas de un empresario mexicano que no habría usado solo él sino también la reina Sofia y algunos de sus nietos.