La ambigüedad del juez sobre Cospedal
El auto del juez Manuel García-Castellón refleja una doble actitud. Por un lado, defiende a María Dolores de Cospedal y a su marido Ignacio López del Hierro frente a la pretensión de la Fiscalía Anticorrupción, cursada el 4 de septiembre de 2020, de citarles como investigados/imputados. Por el otro, admite que las anotaciones en las nuevas agendas del comisario José Manuel Villarejo halladas en su domicilio – periodo 2007-2016 – incorporan posibles vinculaciones de ambos con la trama Kitchen.
Está claro cuál es la operación. Es un dispositivo para capturar papeles de Luis Bárcenas comprometedores para el Partido Popular y altos dirigentes del mismo, operación bajo la dirección de Eugenio Pino, director adjunto operativo de la Policía, el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, y el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz. El juez insiste en que no hay evidencias de que Cospedal y López del Hierro participaran en 2012 en el proyecto de desactivar la investigación del caso Gürtel con ayuda de la cúpula policial.
“Las diligencias practicadas no han permitido vincular este proyecto ni con Cospedal ni con López del Hierro” señala el auto. Y usa la declaración de Luis Bárcenas, del pasado 21 de diciembre, en apoyo de su argumento. “Al ser preguntado sobre este proyecto, desconocía la existencia de vínculo alguno entre el mismo y el partido”. Problema: como el mismo juez admite, esta declaración está bajo secreto. ¿Por qué la utiliza entonces el juez? Al tiempo, el juez cita anotaciones de Villarejo de 2012 en las que Cospedal y López del Hierro en colaboración con policías como el ex jefe de la UDEF (Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal), José Luis Olivera, ente otros, intentan acabar con la investigación de la Gürtel.
Implicados al máximo
En 2012, Cospedal defiende a Luis Bárcenas, imputado, según consta en los registros de Villarejo. Pero en 2013, la secretaria general del PP cambia. Se ha conocido que el ex tesorero amasa una fortuna de 48,2 millones de euros en Suiza. En 2013, el 11 de julio, cuatro días antes de la confesión de Bárcenas sobre sus Papeles ante el juez Pablo Ruz, empieza el montaje de la operación Kitchen para sustraer a Bárcenas papeles comprometedores para el PP, Rajoy y la propia Cospedal.
Cospedal y López del Hierro están a tope en esa operación, según las anotaciones de Villarejo. Pero en la causa, contra lo que afirma el juez, sí hay evidencias contra Cospedal y López del Hierro en relación a sus tratos con Villarejo para desactivar el caso Gürtel. Se trata del audio de 2009 en el que los tres contratan los servicios de Villarejo. Cospedal ha justificado públicamente esa grabación porque estaba en su obligación como secretaria general del PP enterarse de informaciones que podía aportarle Villarejo.
