La plataforma de Yolanda Díaz sale adelante entre los recelos de Podemos
Los comunes, a diferencia del partido lila, sabían que la vicepresidenta crearía la asociación Sumar para organizar el "proceso de escucha"
MadridSi hay una cosa que Yolanda Díaz no se ha cansado de repetir desde que anunció su nuevo proyecto político es que quiere que los partidos tengan un papel secundario. De hecho, pretende que en la primera fase para construir la plataforma el protagonismo sea para la sociedad civil. Así, la vicepresidenta segunda ha decidido organizar el llamado “proceso de escucha” a través de una asociación nueva que llevará por nombre Sumar –una palabra que ha ido repitiendo últimamente para pedir unidad a la izquierda, especialmente en Andalucía– para evitar depender de los partidos. Ahora bien, que Díaz haya dejado claras sus intenciones no quiere decir que todo ello no genere inquietud entre las formaciones que la plataforma tendría que aglutinar. Especialmente en Podemos, con quien la relación hace semanas que es más que tensa.
El equipo más estrecho de Díaz solicitó el registro de esta asociación a principios de abril y todavía está pendiente que el ministerio del Interior dé el visto bueno. El proceso podría tardar unos tres meses y, por lo tanto, el equipo de la vicepresidenta contaba tener a punto la entidad a principios de verano, una vez hubieran pasado las elecciones andaluzas del 19 de junio, cuando Díaz pretende empezar su proceso de escucha. Ahora bien, la misma ministra ha admitido este jueves que no ha decidido si el nombre será el de la marca electoral para las próximas elecciones -la vicepresidenta ni siquiera ha confirmado aún que será candidata-. Podemos asegura que no tenía constancia de las intenciones de Díaz. “No lo sabía”, ha confirmado la ministra de Igualdad, Irene Montero, en declaraciones a los medios de comunicación. Desde el equipo de la vicepresidenta segunda admiten que no habían informado a los partidos de este registro. “Los partidos sabían que Yolanda Díaz lo quería hacer de forma independiente”, afirman fuentes del entorno de la ministra de Trabajo, que recuerdan que ni la propia Díaz figura como miembro de esta asociación. Confirman que lo han solicitado personas próximas a la vicepresidenta como la regidora de Compostela Aberta Marta Lois.
Ahora bien, sí que es cierto que parte de los comunes estaban al tanto de esta operación, según confirman varias fuentes de la formación al ARA. La relación entre Díaz y el partido de Ada Colau es muy estrecho y la comunicación es fluida y constante, sobre todo con la dirección. La propia vicepresidenta ha explicado este jueves, por ejemplo, que antes de que la alcaldesa de Barcelona confirmara que se presentaría a un tercer mandato la llamó para comunicárselo y Díaz explicitó ante los medios de comunicación su intención de participar en su campaña. Los comunes no han escondido nunca su sintonía con la vicepresidenta y su intención de volcarse con su proyecto político.
La sintonía con Errejón y García
Más allá de si la vicepresidenta segunda informó o no a los partidos sobre Sumar, algunas voces de Podemos reconocen que se sienten “menospreciados” y hay malestar por cómo Díaz está impulsando la plataforma. De cara a la galería, sin embargo, evitan la confrontación y fuentes oficiales del partido quitan hierro al hecho de que la ministra no les comunique ninguno de los pasos: “Ya lo hará cuando toque”.
Los recelos entre los lilas y el equipo de Díaz contrastan con la buena sintonía que exhibe la ministra con la líder de Más Madrid, Mónica García. En los últimos días, las dos se han dejado ver en actas como la manifestación del 1 de mayo, durante las fiestas de San Isidro de Madrid o en actos como la presentación del libro de García Política sin anestesia. Díaz también compartió escenario hace unos días con Íñigo Errejón en un acto conjunto sobre salud mental y precariedad laboral. De momento, sin embargo, también están expectantes sobre cómo se acaba concretando la plataforma por si la sintonía entre los dos equipos puede ir más allá.
