La reforma laboral, en manos de ERC o del PDECat

MadridÚltimas horas de conversaciones in extremis para conseguir los apoyos a la reforma laboral. Su aprobación está en manos de Esquerra o del PDECat, que pueden acabar de articular la mayoría necesaria en el Congreso. Los 13 votos de los republicanos acabarían de dar tranquilidad al gobierno español, que si no los consigue, cuenta que los cuatro diputados del PDECat y los dos de Unión del Pueblo Navarro sean suficientes para sacarla adelante. Este miércoles la formación liderada por Ferran Belio en Madrid reúne a su dirección para tomar una decisión. Otros partidos minoritarios como Cs, Más País, Compromís, Partido Regionalista de Cantabria, Teruel Existe, Nueva Canarias y Coalición Canaria ya han dado su sí.

La vicepresidenta segunda del gobierno español, Yolanda Díaz, ya asume la posibilidad de no lograr el apoyo de las fuerzas que permitieron la investidura y la aprobación de los dos últimos presupuestos generales del Estado: PNV, ERC y EH Bildu. Los independentistas parecen los más alejados y los nacionalistas vascos se mantienen en el no, pero las negociaciones continúan hasta el último minuto. El entorno de la ministra de Trabajo expresaba este martes una cierta decepción con ERC, a quien advierten de que tendrá que explicar por qué vota junto al PP y Vox para el mantenimiento del mercado laboral del 2012. La última maniobra de presión serán los datos de afiliación que se harán públicos este miércoles: fuentes del ejecutivo español apuntan que en el último mes ha subido sustancialmente el porcentaje de contratos indefinidos gracias a la reforma laboral, que es vigente desde que se aprobó por real decreto.

“Pueden provocar que el viernes los trabajadores se levanten con menos derechos”, ha recordado Díaz en declaraciones a los medios desde el Senado. En el ministerio explican que hay múltiples llamadas a la dirección general de Trabajo de ciudadanos preocupados por que los incrementos salariales que ya están notando se reviertan si no se convalida el decreto en la votación del jueves en la cámara baja. La vicepresidenta segunda no se resigna a acabar consiguiendo el apoyo de ERC y su entorno remarca que en el último documento enviado al equipo negociador plantean propuestas interesantes para Catalunya.

Con todo, se aprobarían con posterioridad a través otros decretos, no vía enmiendas al actual, y los republicanos insisten que no se tendría que esperar más. "¿Por qué tendríamos que confiar en que se cambiará después si no se puede hacer ahora?", se preguntaba en la misma línea la portavoz de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, este martes. El equipo de Díaz asegura que el compromiso de PSOE y Unidas Podemos quedaría por escrito y lamenta que se acuse a la ministra de no negociar. Aun así, la secretaria general adjunta de ERC, Marta Vilalta, ha criticado desde el Parlament que “no hay ninguna propuesta concreta para modificar la reforma laboral” y que, por lo tanto, la posición de su partido “no ha variado”, informa Cesc Maideu. Varias fuentes del gobierno español señalan que en ERC hay dos o tres almas, con una partidaria de aprobar la nueva legislación, una contraria y otra que duda.

Relativa tranquilidad

La vía ERC se presenta muy complicada, pero en el gobierno español no hay una gran preocupación. Díaz ya subraya que lo importante es que se apruebe –más allá de si se puede hacer o no con los socios que querría– y otros ministros tienen el convencimiento de que el texto saldrá adelante. En el sector socialista del ejecutivo confían que el PDECat dará el sí –así explican que lo ha trasladado en privado– y que UPN, como mínimo, se abstendrá. La balanza quedaría decantada por un solo voto y cualquier imprevisto la podría hacer añicos, pero hay una cierta tranquilidad en el gobierno español de que no habrá sorpresas. Incluso creen que ERC se mantiene en el no porque, en el fondo, sabe que el Congreso dirá sí a la reforma laboral.