La telaraña de Sánchez
MadridPedro Sánchez ha aprovechado esta semana para añadir las piezas que le faltaban a su telaraña gigante: tras cazar a Carles Puigdemont ahora ha añadido Alberto Núñez Feijóo.
El presidente español ha repetido la estrategia del abrazo a Junts y ERC con Feijóo. Por eso aceptó a toda prisa reunirse con él aunque fuera en el Congreso y no en la Moncloa, y después aceptó la curiosa propuesta de negociar la renovación del CGPJ bajo la supervisión de la Comisión Europea. Ahora Sánchez ya tiene a Feijóo donde quería: dentro de la dinámica del diálogo institucional.
Los que quedan atrapados en esta telaraña siempre piensan que podrán salir cuando quieran, pero no es así: una vez estás dentro es muy difícil bajar del tren. Lo hemos visto también esta semana con Junts, que tras amenazar con acciones legales a los jueces que no acudieran a las comisiones de investigación, finalmente ha tenido que ceder a la pretensión del PSOE de no citar a magistrados. Todo un déjà-vu de lo que ya le ocurrió a ERC en multitud de ocasiones la pasada legislatura.
Financiación autonómica
El próximo objetivo de la telaraña de Sánchez serán los presidentes autonómicos del PP, a los que tentará con una reunión y una foto en la Moncloa (¿quién se atreverá a decir que no?) y con el dinero de la financiación autonómica. Feijóo, como antes Rajoy, no sabe qué hacer con esta cuestión: si impone una posición única del PP tendrá que enfrentarse a sus varones, y si deja que cada uno de ellos negocie de forma bilateral con el gobierno español, se verá que eso es un caos. En la Moncloa Sánchez ya peina a su gato...
Pero el objetivo no es sólo tener ligados socios y oposición sino que va mucho más allá. Sánchez sabe que con cuatro años por delante ni a los jueces como colectivo ni a los empresarios les conviene romper puentes con él. Por eso Félix Bolaños es el hombre cuya misión es pacificar el frente judicial y en los últimos días se ha cansado de realizar llamadas y reuniones. En última instancia, existen muchos jueces pendientes de un ascenso a los que conviene que la situación del CGPJ se regularice. El tiempo juega a su favor.
Y finalmente está el frente económico, en el que en los próximos días se conocerá el nombre del nuevo ministro o ministra del ramo, que tendrá como principal objetivo engordar las relaciones con los poderes económicos. El Ibex 35 es un colectivo mucho más pragmático que los jueces, y la Moncloa tiene demasiadas palancas para molestarles. La entrada del Estado en Telefónica es una primera señal de que, con la excusa de la autonomía estratégica, a este gobierno no le temblará el pulso para tomar decisiones.
En definitiva, Sánchez va desplegando poco a poco su telaraña sabiendo que, tarde o temprano, todo el mundo acabará quedando atrapado. Es la ley de la gravedad de la política. Si alguien se pregunta por qué sonríe tanto últimamente, aquí tiene la respuesta.
Los detalles
Llega Navidad y el Palau de la Generalitat ha abierto sus puertas para que entre la ciudadanía, que ha dejado mensajes para el 2024 colgados en la entrada principal. Por una Catalunya... "que apueste por la educación"; "libre"; "donde todo el mundo sea feliz"; "española"; "llena de amor"; "sin redes sociales". Por si no le traen los Reyes, Arnau también ha aprovechado para pedir al presidente Aragonès que le lleve "un billar".
La Asociación de Periodistas Parlamentarios de Madrid ha entregado esta semana sus tradicionales premios y ha nombrado a Míriam Nogueras, de Junts, "azote de la prensa", es decir, la que tiene peor relación con los periodistas. En cambio, Ferran Bel, del PDECat, ha ganado el de mejor relación con la prensa. Aitor Esteban (PNV) fue declarado como mejor orador y Óscar Puente, del PSOE, como diputado revelación.