Barcelona rehace el rompecabezas del Frente Marítimo para protegerlo de los temporales

BarcelonaCambios en los planes del Ajuntament de Barcelona para completar la reforma del frente litoral de la ciudad. La arquitecta jefe, Maria Buhigas, ha presentado este miércoles los retoques que ha tenido que hacer sobre el proyecto que había dejado preparado el anterior gobierno municipal. Unas modificaciones que ha justificado por la necesidad de proteger la obra de unos temporales cada vez más agresivos y que supondrán un movimiento de piezas que afectará desde los clubs de fútbol de Poblenou hasta el Primavera Sound.

Para entender los cambios que ha planteado este miércoles Buhigas, hay que remontarse en otoño del año pasado, cuando un par de temporales de mar derrumbaron parte del muro de protección de la playa de la Nova Mar Bella y obligaron al Ayuntamiento a reconstruirlo de urgencia. La evidencia de que los temporales son cada vez más agresivos hizo que el consistorio se replanteara el proyecto y retirara 20 metros atrás la parte del paseo que quedaba más cercana a la costa. Esto permitirá ganar casi una hectárea de playa en la ciudad y preservar su nuevo paseo.

"Se trata de hacer compatible la dignificación del litoral con la necesidad de adaptarnos al cambio climático", ha argumentado la teniente de alcaldía de Urbanismo, Laia Bonet, en declaraciones a los medios. Retrasar unos metros el muro, sin embargo, ha generado algunos quebraderos de cabeza en el consistorio, ya que le ha obligado a encontrar un nuevo emplazamiento para el campo de fútbol Agapito Fernández ya resolver el baile de piezas que esto provoca en el litoral de la ciudad.

Según ha explicado Buhigas, la solución del gobierno municipal implica trasladar el campo unos metros más al norte y hacerlo de nuevo –con graderías y unos vestuarios en mejores condiciones que los actuales– encima de la plataforma marina del Fòrum. Un traslado que supondrá tener que hacer cambios también en algunos de los usos que se hacen habitualmente de la plataforma, como los conciertos que suele realizar el Primavera Sound y que ahora verán cómo pierden una parte del espacio habitual.

La necesidad de construir un nuevo campo de fútbol hasta ahora no previsto en el proyecto comporta también un retraso en la ejecución de la obra, que no se podrá acabar este mandato como estaba previsto y deberá alargarse hasta en el año 2029. Sí que se completará en el 2027, sin embargo, el tramo central del paseo, lo que pasa por encima de las playas de la Nova Mar Bella y de Llevant.

El resto, al no retirarse el campo de fútbol actual hasta que esté en funcionamiento el nuevo, deberá esperar el principio del próximo mandato. El coste de la obra y de los proyectos ejecutivos que sí se podrán realizar dentro de este mandato asciende, según el Ayuntamiento, a 17,8 millones de euros.

Sin gradas, de momento

Otro de los aspectos que preveía el proyecto original y que por ahora tendrá que esperar es el de la sustitución del muro por una especie de gradería que ayude a superar el cambio de nivel entre el paseo y la playa. El Ayuntamiento ha explicado que actuar sobre este espacio requiere un acuerdo entre administraciones que retrasaría aún más toda la obra, por lo que prefiere empezar sin esperar las gradas y hacerlas más adelante cuando exista el permiso.

La urbanización de este tramo de paseo Marítim permitirá enlazar los barrios de Diagonal Mar, el Frente Marítimo de Poblenou y el Besòs y el Maresme. Lo hará urbanizando una zona que ahora es un gran solar de cemento y transformándola en un paseo más verde con un carril de cuatro metros de ancho para bicicletas y una franja con pistas deportivas y zonas de juego.

Todo ello busca descongestionar un poco el uso deportivo que se hace de la playa y trasladarlo a este paseo superior, donde habrá, por ejemplo, pistas de voley playa. También se desplazarán dos chiringuitos que hasta ahora se instalaban temporalmente en la arena y que ahora podrán permanecer todo el año en la parte superior.