Profanan el panteón Coromina, una joya modernista del cementerio de Barcelona
Los Mossos investigan el robo de parte de la barandilla del mausoleo, que ya había sido atacado en el pasado
BarcelonaDescansar en paz se está convirtiendo en todo un reto en el cementerio de Montjuïc. A la ola de robos en nichos que se produjo este verano, cuando unos ladrones profanaron más de 160 tumbas para hacerse con joyas de los difuntos, se ha sumado en los últimos meses otro acto de pillaje. Alguien se ha llevado prácticamente toda la barandilla de hierro forjado que rodeaba la terraza del panteón Coromina, uno de los pocos estilos modernistas que hay en el cementerio. Lo explica desolado Albert Sáenz, bisnieto del industrial Lluís Coromina y ahora propietario del mausoleo. Lamenta que no sea la primera vez que el monumento sufre robos o actos de vandalismo. Hace años ya entraron en la cripta para robar unos candelabros también modernistas de alto valor y más recientemente también tuvieron que arreglarse unos vitrales que alguien había roto a pedradas. "Siempre que me acerco al cementerio lo hago cruzando los dedos", relata.
A raíz de estos incidentes pasados, Sáenz explica que Cementiris de Barcelona le había prometido que se incrementaría la seguridad, y se había instalado alguna cámara de seguridad en la zona. Sin embargo, esto no evitó que el 16 de diciembre otros asiduos del cementerio con el que guarda relación avisaran a Sáenz del nuevo destrozo. "Si fuera verdad todo lo que dicen que habían hecho, esto no debería haber ocurrido", denuncia Sáenz. Fuentes del cementerio, sin embargo, defienden que "la seguridad es una prioridad" para ellos, y que el espacio cuenta con vigilancia 24 horas a través de vigilantes, cámaras y elementos disuasorios. Subrayan, además, que en cuanto fueron conocedores de la sustracción de un tramo de la valla del panteón presentaron su propia denuncia a los Mossos, a quienes facilitaron las grabaciones de las cámaras de seguridad.
Fuentes policiales explican en el ARA que ya investigan el caso y también un robo similar en otra tumba del cementerio sin valor patrimonial. La teoría con la que trabaja la policía es que los ladrones "no son conscientes" del valor de la barandilla que se llevaron, y sospecha que quieran venderla como chatarra. Lo desvinculan completamente de la profanación de 160 tumbas en verano, donde el objetivo sí que era llevarse objetos de valor como joyas y metales. Sáenz, sin embargo, no las tiene todas y sospecha que los ladrones sí son conscientes del valor de la verja modernista, que vaticina que en estos momentos estará "decorando algún jardín privado o en algún balcón de un chalet". En todo caso, da prácticamente por perdida la verja, y explica que restituirla tal y como era será prácticamente imposible. De momento, explica, el cementerio se ha ofrecido a presentarle una propuesta de recuperación y hacerse cargo de ella.
Patrimonio cultural
"Es una lástima que no se cuiden más este tipo de obras. Si estuviera en plaza Catalunya sería un reclamo turístico", reflexiona Sáenz, que se muestra crítico con que Cementiris de Barcelona no vele más por cuidar ese patrimonio. En este caso, además, el panteón Coromina está incluido en uno de los itinerarios de interés diseñados por el propio cementerio, que en su web destaca precisamente "los importantes trabajos de bronce" de la obra y la enaltece como un "modelo suntuoso de artes aplicadas dentro de las tendencias más modernas de aquella época".
Hace un tiempo, en un artículo en el ARA, el escritor y antropólogo Xavier Theros se refería así: "[...] edificada entre los años 1906 y 1907. Se trata de uno de los pocos panteones modernistas de Montjuïc, proyectado por el arquitecto municipal que se encargó de planificar todo el cementerio, Leandre Albareda, autor también de la tumba de Joan Pàmies en la Vía Santa Eulalia o del panteón de la familia Riera, a pocos pasos de aquí. Este cenotafio consiste en una terraza de mármol, con una doble escalinata y unas barandillas de hierro forjado, hechas por la fundición de la Viuda Argelaguet, sobre la que hay un ángel espectacular esculpido por Rafael Atché. subterránea, con una capilla decorada con columnas, donde están situadas las tumbas familiares.Un espacio iluminado por tres ventanales, con vidrieras de Rigalt y Granell.A la vez, una clase de arquitectura y de diseño, para un lujoso lugar de reposo". Hoy, de las barandillas de hierro forjado hechas por la fundición de la Viuda Argelaguet ya sólo queda un pequeño pedazo.