La brecha de género del covid, en 15 gráficos

Las mujeres han ocupado la mayoría de profesiones en la primera línea en la lucha contra el coronavirus, trabajos, en muchos casos, mal pagados y precarias. Y también las mujeres han sufrido más las consecuencias adversas de la pandemia en el mercado laboral. Las expertas alertan de que muchas de las pérdidas profesionales serán irreparables.

La pandemia también ha tenido impacto en la salud mental y emocional de las personas y, en especial, de las mujeres que han sufrido más estrés y ansiedad, en parte, por las dobles y triples jornadas profesionales y domésticas priorizando el cuidado de los demás por delante del propio.

El teletrabajo con hijos en casa o personas dependientes a cargo no ha sido una herramienta real de conciliación, ya que la sobrecarga de trabajo no remunerado ha continuado recayendo sobre ellas.

Hacer la compra es la única actividad doméstica que los hombres han hecho más que las mujeres. Es también la única que se hace fuera del hogar y que permitía romper el confinamiento durante los meses de marzo y abril.

Las mujeres han sufrido más la violencia de género, sobre todo durante el confinamiento, ya que se vieron obligadas a convivir con su agresor y esto es tradujo en un aumento de llamadas por violencia machista.

Las mujeres han sido más expuestas al virus -son el 70% del personal sanitario y el 84% del personal de residencias- y, por tanto, se han contagiado más. Sin embargo, a pesar de haber estado en primera línea en el ámbito profesional y en el familiar y doméstico, esto no se ha traducido en más presencia en los centros de decisiones ni en los medios de comunicación, donde continúan infrarrepresentadas.