¿Cómo cambiaría la vida si nos quedáramos con el horario de invierno? ¿Y con el de verano?
Analizamos los pros y los contras de elegir un horario u otro
¿Cuál es mejor horario, el de verano o el de invierno? El debate está servido. Si nos quedáramos con el horario de verano, en la práctica los cambios serían notables durante el invierno. Estos serían los efectos más destacados que notaríamos, especialmente en torno al solsticio invernal:
- La salida de sol se produciría alrededor de las nueve y media de la mañana.
- La puesta de sol sería hacia las seis y media de la tarde.
- Estaríamos dos horas por encima del horario solar.
- Conclusión: en invierno ganaríamos claridad por la tarde, pero entraríamos en los trabajos y en las escuelas todavía de noche.
En caso de que nos quedáramos definitivamente con el horario de invierno, los cambios los notaríamos en verano, y sobre todo alrededor del solsticio veraniego:
- El sol saldría hacia las cinco y media de la mañana.
- La puesta de sol sería hacia las ocho y media de la tarde.
- Estaríamos sólo una hora por encima del horario solar.
- Conclusión: el sol saldría muy temprano, pero perderíamos una hora de claridad por la noche.
- Importante: sin embargo, la luz solar seguiría garantizada hasta la hora de cenar.
¿Invierno o verano? ¿Cuál es el mejor horario
Hay gente que defiende el horario de verano porque la luz se alarga más por las noches. Pero con los datos en la mano, mucha gente podría cambiar de opinión. Hay que tener en cuenta sobre todo dos factores: la ubicación geográfica y el horario solar, el más natural para nuestros ritmos vitales.
Ante todo, en cuanto a la ubicación geográfica de Cataluña, debemos tener en cuenta que nuestro huso horario debería ir alineado con el del meridiano de Greenwich, ya que pasa muy cerca del país y cruza el este de la península. Por tanto, nos correspondería ir con el horario del Reino Unido, de Portugal o de Canarias, y no con el del centro de Europa como hasta ahora. Cabe recordar que España ahora comparte huso horario con el centro de Europa porque en 1940 el dictador Francisco Franco quiso alinearse con el de la Alemania nazi de Hitler y el de la Italia de Mussolini.
A todo ello debemos sumarle el factor del horario solar, que es el más natural para nuestros ritmos vitales según nuestra posición geográfica en el mundo. Técnicamente, el horario solar es un sistema de medida del tiempo basado en la posición del sol en el cielo en cada zona del mundo. En estos momentos, en Cataluña, en verano estamos dos horas por encima del horario solar, y en invierno sólo una hora por encima. Por tanto, el horario de invierno es el más esmerado con nuestros ritmos biológicos.
Por tanto, teniendo en cuenta todos estos factores, queda claro que en Cataluña nos correspondería quedarnos con el horario de invierno, ya que nos acercamos más al horario solar natural que nos corresponde y, además, con este horario invernal tendríamos luz garantizada durante la jornada laboral estándar tanto en invierno como en verano.
Además, todos los estudios recientes indican que a nivel de salud y biológico, el horario de invierno también es el mejor. Los datos son claros, pero por el momento tocará seguir haciendo cambios de horarios. El próximo será este fin de semana, cuando entraremos oficialmente en el horario de invierno, lo que nos correspondería. Veremos si es el último y definitivo cambio horario a realizar.