Los 'influencers' islámicos ganan adeptos entre los jóvenes musulmanes en Cataluña

Mataró / Rueda de TerNo son vídeos cutres, sino todo lo contrario. El set está minuciosamente cuidado, el montaje es impecable y el sonido de alta calidad. El podcast se llama Regreso a la verdad, y tiene ni más ni menos que 46.800 seguidores en Instagram. “El hombre necesita que, cuando quiere estar con su mujer, ella esté dispuesta. Y está prohibido [en el islam] que ella se niegue, excepto que tenga un motivo legítimo: la menstruación, si está pasando un momento difícil… (…) Aunque esté cocinando, tiene que dejar de cocinar e ir”, dice el sheik Yusuf Soldado en uno de los vídeos del podcast, en el que conversa distendidamente con otro influencer islámico, Aleksandar Petrov, aún más popular. Petrov tiene 508.000 seguidores en Instagram.

Ambos van con un look típico de los países del Golfo –túnica blanca, turbante y barba poblada y larga–, hablan perfectamente castellano y viven en Cataluña. Y lo más importante: son excelentes oradores. Su podcast engancha.

“La esposa tiene la obligación de obedecer al marido en todo lo que no sea haram. Hay dos posibilidades: que el hombre te lo diga por protección porque a lo mejor él ve algo que tú no ves y le tienes que obedecer. O puede ser que sea un hombre opresivo y, en este caso, igualmente estás obligada a obedecerle, y Allah ya le pasará cuentas”, afirma Petrov en otro momento del podcast, mientras Soldado asiente.

El Congreso Islámico

Del 19 al 21 de diciembre está prevista la celebración en el Prat de Llobregat del XVI Congreso Islámico de Cataluña y el IV Congreso de Jóvenes Musulmanes, en los que debía intervenir Yusuf Soldado. A final de octubre diversos medios de comunicación informaron que tanto Soldado como otro ponente del congreso, Taoufik Cheddadi, estaban vinculados al yihadismo. Eso, unido al hecho de que la Unió de Comunitats Islàmiques de Catalunya (UCIDCAT), que organiza el evento, lo publicitara inicialmente con un logo de la Generalitat hicieron que Vox y Aliança Catalana llevaran el asunto al Parlamento y exigieran la suspensión del congreso.

La Direcció General d’Afers Religiosos de la Generalitat ya ha aclarado que ellos no financian el acto a pesar de que su logo apareciera en el cartel inicial. Y UCIDCAT asegura que el programa definitivo del congreso aún no está cerrado y ha denunciado a uno de los medios que publicó “falsedades”. Sea como sea y más allá de la polémica, de lo que no hay duda es que Soldado tiene un éxito total entre los jóvenes.

“Yusuf Soldado explica muy bien qué es el islam con palabras simples”, dice Houssam Eddine, de 27 años, que es uno de los jóvenes que el año pasado constituyó la asociación cultural Ar-Rissala, en Roda de Ter (Osana). Sus padres son de Marruecos, pero él nació aquí. Habla un catalán con acento de Vic, y asegura que no entiende la mitad de las cosas que dice el imam de la mezquita que frecuenta, porque habla en árabe clásico. No es el único joven musulmán que tiene el mismo problema. La mayoría de los imames de Cataluña son extranjeros. En cambio, a Yusuf Soldado, lo entienden a la perfección.  

La asociación Ar-Rissala invitó a Yusuf Soladado en julio pasado a un acto en Roda de Ter. “Si lo traes a él, llenas la sala”, asegura Houssam. Pero lo que no esperaba es que el Ayuntamiento les negara un espacio municipal en el último momento para celebrar el acto y tuvieran que buscar una alternativa a toda prisa. “Queríamos hacer una charla sobre convivencia en la que participara todo el pueblo y la gente pudiera hacer preguntas”, asegura el joven, que no entiende el cambio repentino del consistorio. El acto se hizo al final en una sala de la parroquia.

“Teníamos dudas sobre el discurso que pudiera hacer esta persona”, justifica el alcalde de Roda de Ter, Toni Mas, de ERC, para el cambio de decisión. “Hay municipios que vamos perdidos con este tema y no sabemos qué hacer. Necesitaríamos apoyo en mediación cultural”, añade.

Trabajo social y pastoral

Yusuf Solado no sólo es un excelente orador, sino que también preside la asociación islámica Iqra en Mataró que realiza trabajo social y pastoral. Por ejemplo, imparten clases de árabe y de refuerzo escolar, ofician casamientos, organizan viajes a la Meca y distribuyen comida a familias necesitadas. “Hemos llegado a tener hasta ochenta familias”, asegura. También admite que las mezquitas le solicitan a menudo que imparta charlas a los jóvenes y que empezó a hacer el podcast hace un par de años porque se dio cuenta de que casi no había contenido en español sobre el islam en las redes. Es una persona afable y accesible. No ha puesto inconveniente a contestar ninguna pregunta del ARA.

¿Lo que plantea sobre las mujeres no va contra la ley del consentimiento y las libertades individuales? “Solo una mente enferme e ignorante sobre el islam podría interpretar que está permitido forzar a la mujer (…). Lo que estamos diciendo es que si ella no desea mantener relaciones con su esposo sin una excusa válida, cometerá una falta ante Allah”, responde.

"No sé por qué nos sorprendemos tanto. El derecho canónico de la Iglesia católica plantea prácticamente lo mismo sobre el débito conyugal", destaca la doctora en derecho Miren Ortubay. "Otra cosa es que quienes se declaran católicos lo sepan y lo cumplan, de la misma manera que se divorcian aunque en teoría el matrimonio es indisoluble, porque la Iglesia ya no tiene la influencia que tenía en otras épocas", añade. Y ahí está el quid de la cuestión.

Según el estudio La Religiositat de la Joventut Catalana, publicado por la Generalitat el pasado septiembre, los jóvenes musulmanes frecuentan mucho más los lugares de culto que los católicos, su situación económica es más precaria y tienen un nivel de estudios mucho más bajo. En concreto, el 46,5% tiene estudios primarios o inferiores frente el 10,9% de la población católica y el 17,5% de la protestante.

Las cifras

“No podemos predicar aquí lo mismo que en Arabia Saudí, ni hacer la misma interpretación del Corán porque el contexto es diferente”, afirma la responsable de una asociación musulmana de Mataró que disiente con los postulados de Yusuf Soldado y que prefiere mantener el anonimato. Por su parte, el secretario general de la Federació Consell Islàmic de Catalunya, Mohamed Halhoul, lamenta que la enseñanza de religión islámica en los colegios públicos y concertados siga siendo un plan piloto y apenas existan profesores. Es decir, se delega la formación a las mezquitas o, aún peor, a internet. 

Mientras, los jóvenes de la asociación Ar-rissala de Roda de Ter se sienten discriminados. No entienden que les pongan tantos palos en las ruedas. “Trabajamos y nos hemos formado aquí. Nosotros también somos catalanes”, recuerdan.