Cataluña reduce las emisiones de CO₂ por primera vez desde la pandemia
Los datos siguen "muy lejos" de los objetivos internacionales para 2030
BarcelonaBajada importante –aunque insuficiente– de las emisiones de gases de efecto invernadero. En 2023 las emisiones de CO₂ disminuyeron un 5,5% en Cataluña en comparación con el año anterior. La meta alcanzada supone un cambio de tendencia destacable, ya que desde que en el 2020 las emisiones cayeron en picado por la pandemia, los datos de este indicador no habían dejado de crecer en Catalunya. En 2021 los gases de efecto invernadero emitidos en el país repuntaron un 1,9% respecto al año anterior, y en 2022 aún se aceleraron más, hasta un 3,1%. Así lo demuestran los datos hechos públicos este jueves por el Monitor Público de Emisiones de Catalunya, un grupo independiente de expertos que han elaborado, por primera vez, una estimación de emisiones de CO₂.
Este informe provisional se creó el año pasado para tener información más actualizada sobre las emisiones en el territorio y es la primera vez que se publica justo después de que acabe el año, en vez de esperar los datos oficiales, que normalmente tardan año y medio a hacerse públicas. Según este análisis, la reducción de gases de efecto invernadero que se ha vivido en este último año en Catalunya se atribuye a una disminución del consumo. Destaca sobre todo la rebaja de un 16% de las emisiones que se generan con la producción de electricidad, pero también la caída de un 9% en el consumo de gas natural y de un 2% en los carburantes para el transporte por carretera, es decir, de gasolina y gasoil. Estos datos provisionales ofrecen unos resultados en el mismo sentido que otras previsiones similares como las del informe del Observatorio de Sostenibilidad o las tendencias generales de la Unión Europea.
Aunque Cataluña ha empezado a hacer los deberes para abordar de los principales motivos del cambio climático, la reducción de más de un 5% de las emisiones todavía queda muy lejos de los objetivos y compromisos alcanzados a escala internacional en cuanto a la rebaja de estos gases. De hecho, según el Acuerdo de París (el tratado internacional sobre el cambio climático) el pasado año Catalunya debería haber generado un 37% menos de emisiones de las que ha producido. Además todavía quedan muchos pasos por dar a la hora de alcanzar el objetivo que se marcaron el gobierno catalán, el español y también la Unión Europea para frenar el calentamiento global de cara al año 2030. Para lograr este objetivo, sería necesario que, desde ese mismo 2024, se redujeran un 6% las emisiones de CO₂ anualmente.