Odile Romero: "Tenemos un problema muy importante con las benzodiacepinas"

Odile Romero es jefe de sección de neurofisiología y coordinadora de la unidad del sueño del Hospital Vall d'Hebron.

¿Existe relación entre pies fríos y dormir?

— Si estás nervioso, tienes las manos y pies más fríos, la causa es la descarga de adrenalina. Si estás más nervioso te va a costar más dormirte.

Últimamente veo muchos consejos para dormir bien.

— Porque durante mucho tiempo no se ha valorado, pensábamos que era una pérdida de tiempo y cuando teníamos cualquier plan de trabajo o familiar, restabamos tiempo al sueño. Ahora esto empieza a cambiar, pero no hace falta ir a los extremos. Leo cada cosa por internet…

¿Qué lee que le preocupe?

— Excesiva obsesión. El sueño es una función fisiológica y biológica. Yo no me preocupo de cómo mi riñón hace la orina.

¿Cuántas horas debemos dormir?

— Es la pregunta del millón. Lo normal es alrededor de ocho horas. Pero lo importante es estar bien durante el día. Si una persona duerme seis horas y está bien, no hay problema.

¿Cuándo es un problema?

— Si te despiertas mal. Entonces debe mirarse si es un problema de estrés, si hay alguna crisis epiléptica o sonambulismo, si estamos haciendo todas las fases del sueño…

Son tres fases, ¿no?

— Sueño superficial, sueño profundo y fase REM. Y cada noche repetimos entre tres y cuatro veces estos ciclos.

¿Por qué hay gente que necesita tanto dormir, y otras tan poco?

— Depende de muchas cosas. Pero cuanto más adenosina gastas, mayor necesidad tienes de dormir.

¿Adenosina?

— Es la molécula que transporta energía por dentro de la célula. El café, lo que hace, es bloquear a los receptores de la adenosina, por eso nos mantiene en víspera.

¿Qué relación existe entre no dormir y salud mental?

— Una relación directa. Facilita el riesgo de depresión, ansiedad y demencia.

¿Entonces es buena idea tomar pastillas?

— En las guías europeas el tratamiento para el insomnio son terapias cognitivo-conductuales.

Pues conozco a mucha gente que la toma.

— Porque tenemos un problema muy importante. Somos el país de Europa que consume más benzodiacepinas.

¿Quiere decir ansiolíticos?

— Orfidal, diazepam, tranquimazín, todo esto son benzodiacepinas. Están aprobadas para la ansiedad, y sólo para los casos de insomnio agudo en los que pueden tomarse durante cuatro semanas como máximo, porque son pastillas que crean tolerancia.

¿Qué hacer?

— Hay que concienciar a la población, a las empresas, a los políticos, porque son necesarias herramientas o planes de salud para deshabituarnos de estas pastillas. También debemos decir que ahora existe en Europa el daridorexant, que es una esperanza de futuro para los pacientes con insomnio.

¿En qué punto está ese fármaco?

— Se ha aprobado pero no está financiado en España. Sí lo está en Alemania y otros países de la comunidad europea. Y es un fármaco que se postula como solución para los pacientes adulto que sufren un trastorno de insomnio crónico, porque no provoca dependencia ni tolerancia.

Dice que existen trastornos innatos y provocados

— Porque algunos nacen de la misma persona, como hacer apneas de sueño, y otros que son impulsados ​​desde fuera. Por ejemplo, el jet-lag, o el trastorno de alguien que lleva muchos años trabajando de noche. Son trastornos que vienen del exterior.

¿Cómo sabes si haces apneas?

— Normalmente se ronca, porque la apnea es una obstrucción que hace que haya problemas para que pase el aire.

¿Y una pastilla para dejar de roncar no es posible?

— Empieza a haber tratamiento farmacológico para la apnea, no para los ronquidos. Es molesto, lo sé.

Nacemos durmiendo muchas horas y la curva va descendiendo. ¿Pero no repunta en la adolescencia?

— Lo que existe en la adolescencia es un retraso de fase. Es decir, el adolescente necesita acostarse más tarde y levantarse más tarde. Y esto es biológico. Independientemente de quien sea más diurno y nocturno, que está genéticamente tipificado.

No sé si dar clase a las 8 de la mañana es una...

— Usted no puede poner una clase de matemáticas para adolescentes a las 8 de la mañana. Habría que hacer un replanteamiento, pero deberían terminar más tarde, y quizás los profesores no lo verían bien. Es complicado.

¿Y dormir con tapones?

— Ningún problema, yo nunca he podido hacerlo, y menos desde que tuve hijos, que necesitaba oírles.

Ahora que dice de hijos: ¿hasta cuándo deben estar en la habitación?

— Soy estricta. Yo creo que un niño de tres meses como mucho debe salir de la habitación de mis padres.

¿Por qué?

— Porque el niño debe saber que su entorno para dormir es aquél, y cuanto más tarde, más le costará.

¿Un consejo para dormir bien?

— No hacer nada en contra: no tomar café, no mirar al móvil y, también, no obsesionarse. Piensa en los perros.

¿Cómo?

— ¿Qué hace un perro para dormir? Se pone allí, tranquilamente, sin hacer nada en su contra. Pues está.