"Para los niños follar puede ser dar un abrazo"
Repensar la sexualidad facilita a las familias que hablen con sus hijos
Barcelona¿Qué saben los niños sobre sexualidad? ¿Y cómo la viven? Éste es el punto de partida de SexAFIN, el proyecto de investigación-acción sobre educación afectivosexual y reproductiva en las comunidades educativas. La investigación está impulsada por el Grupo de Investigación AFIN del departamento de Antropología de la UAB, dedicado a la investigación sobre familias, reproducción, infancia y sexualidad. SexAFIN nació en 2017 en dos escuelas de Gelida con niños de 2º, 4º y 6º de primaria, y desde 2019 se han ido ampliando hasta incluir a niños y jóvenes de I3 a 4º de ESO de una cuarentena de centros educativos públicos y concertados de todo Río de Janeiro (Brasil) y KwaZulu-Natal (Sudáfrica).
Un tema tabú
La propuesta surge a raíz de la investigación doctoral de Bruna Álvarez, profesora del departamento de Antropología e investigadora del Grupo de Investigación AFIN, centrada en la construcción social de la maternidad en parejas heterosexuales. Esto, sumado al hecho de que otras compañeras del grupo trabajaban en la adopción y la reproducción asistida, les hizo dar cuenta de las diferencias sobre cómo los adultos explicaban sus orígenes a sus hijos: "Los padres de los hijos fruto de relaciones heterosexuales no les explican sus orígenes, la sexualidad sigue siendo un tema tabú y no había investigación sobre la tabú y no había investigación sobre la tabú". Paralelamente, Estel Malgosa, cofundadora del proyecto, hizo un trabajo final de máster sobre maternidades adolescentes en Nicaragua, y vio cómo las niñas y chicas jóvenes tenían su propia manera de construir la sexualidad.
SexAFIN se plantea como una investigación-acción, lo que implica que las antropólogas del Grupo de Investigación y Centro AFIN generen espacios de diálogo con toda la comunidad educativa para hablar de las diversas dimensiones de la sexualidad. En la práctica supone que no sólo se hacen preguntas a los niños, sino que también se cuenta con la opinión del profesorado y las familias sobre la sexualidad, tema que sigue siendo tabú. "Esta es una de las diferencias. Siempre suponemos que los adultos saben mucha sexualidad, pero nunca se plantea como un diálogo ni se propone a los pequeños que participen en la investigación haciéndoles preguntas", explica la doctora en Antropología, Estel Malgosa.
En febrero, la Sala de Exposiciones UAB acogió la muestra Sexualidades e infancias: construyendo saberes , que recogía resultados del proyecto SexAFIN con una treintena de dibujos creados por niños de entre 7 y 11 años de diversas escuelas públicas de primaria de la provincia de Barcelona, que aportaban datos sobre cómo piensan, interpretan y significan. También se proyectó el documental (Re)pensando la educación sexual , basado en el estudio SexAFIN, que se emitió en el Sense Ficció-TV3 y se puede recuperar en la plataforma 3Cat.
Diferentes percepciones de la sexualidad
Hasta ahora la investigación ha aportado resultados comunes, "es lógico, las personas que han participado forman parte de un marco social y cultural similar", apunta Malgosa. Por parte de los niños se evidencia que tienen en cuenta la sexualidad en su día a día y construyen su propio significado aunque no sea el mismo que el de los adultos. Álvarez recomienda que los adultos no miren la sexualidad de los niños con mirada de adulto, porque entonces es cuando entran en pánico. Los más pequeños tienen experiencias a través del cuerpo, hablan sobre todo de cuerpo y placeres, y lo enmarcan en el contexto de sexualidad, de acuerdo con la definición de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Por el contrario, cuando se pregunta a los adultos por sexualidad se centran en el coito heterosexual porque el contexto sociocultural piensa la sexualidad así, de forma limitante. En cambio, cuando se da espacio a las criaturas para que construyan sus mundos vinculados a la sexualidad, ésta se amplía. "Los niños nos enseñan a entender la sexualidad de una forma más holística, no sólo centrada en las prácticas sexuales. Por ellos muchas cosas son sexualidad", comenta Álvarez.
La OMS define la sexualidad como aspecto central del ser humano a lo largo de su vida y engloba el sexo, la identidad de género y los roles, la orientación sexual, el erotismo, el placer, la intimidad y la reproducción.
La investigación antropológica
Lo más diferencial de la investigación antropológica es que considera válido todas las respuestas. "Hacemos preguntas y estamos abiertas a cualquier respuesta que surja. Analizamos a los niños como si fueran grupo cultural propio, capaces de construir significados propios de sexualidad, aunque muchas veces no coincidan con los resultados de los adultos. Por ejemplo, para los niños follar puede ser dar un abrazo", comenta la antropóloga Álvarez. Lo que proponen es dejar de percibir la sexualidad como algo adulto y muy vinculado a las prácticas sexuales y dejar de entender a los niños como seres inocentes y asexuales que deben protegerse del conocimiento sexual.
Cuando tienen los resultados de la investigación hacen un retorno al centro educativo ya las familias, ya partir de ahí el Grupo AFIN les ofrece formación contextualizada. En función de las conclusiones realizan formación a medida para resolver las dudas que les plantea cada centro: "Es una atención personalizada, puede ser formación para el profesorado, talleres para el alumnado o las familias". Álvarez concluye que es importante que los niños sepan que cuando se habla de sexualidad se puede hablar de todo porque "si no, se construyen muchos tabúes tanto por parte de los niños como del profesorado y las familias".
¿Cómo hablar de sexualidad con los hijos? Hablar a menudo incomoda más a los adultos que a los niños. Marta Pujol, educadora afectivosexual, autora del libro Cambios. Un viaje por la pubertad (Editorial Bindi Books, 2024), nos propone hacerlo teniendo en cuenta estas recomendaciones:
1. Empieza por mirarte a ti mismo. Date cuenta de las creencias y las ideas que tienes respecto a la educación sexual y la sexualidad para evitar una mirada sesgada y ser plenamente consciente de lo que estás transmitiendo y educando.
2. Estate abierto a cualquier pregunta. Es importante no escandalizarse ni reprimir preguntas o comentarios. Las familias también deben ser una guía y acompañar a la sexualidad de los hijos como lo hacen con otras áreas de la vida.
3. No te preocupes si no lo sabes todo. No hace falta saberlo todo. Si te preguntan algo que no sabes lo dices con naturalidad, que te informarás y les darás la respuesta lo antes posible. En función de la edad incluso puede buscar la respuesta juntos. Cuando no se dan respuestas, eso se convierte en tabú.
4. Dialogue. La comunicación es una pieza clave, no deben hacerse interrogatorios, se trata de hablar, que sea una comunicación bidireccional. Ten en cuenta cómo es tu hijo y respeta su talante.
5. Hable desde que son pequeños. Las actitudes basadas en estereotipos de género como el tipo de juguete o el color de la ropa implican ya educación afectivosexual. Recuerda que la sexualidad es mucho más que las relaciones sexuales. Los niños cuando tienen curiosidad por su propio cuerpo, no lo hacen desde la erótica.
6. No los satures. Si hablas constantemente dejarán de escucharte.
7. La sexualidad es mucho más que prácticas sexuales. La sexualidad tiene también que ver con temas emocionales, de percepción del propio cuerpo, el autoconocimiento, los cánones o la presión estética.