Juan Diego Flórez: "La música se está uniendo para transmitir el mensaje de paz y de condena a la guerra"
El tenor peruano actúa este domingo en Girona y el 4 de abril en el Concierto por la Paz del Scala de Milà
Barcelona“Será un concierto muy bonito, con dos arias de Rossini espectaculares”, explica al ARA el tenor peruano Juan Diego Flórez (Lima, 1973) sobre el recital lírico que ofrecerá este domingo a las 19 h en el Auditori de Girona con la pianista Cécile Restier, la misma que lo acompañó en octubre de 2021 en el Liceu. En Girona, además de Rossini, cantará “canciones de Schubert y Tosti, arias de óperas de Donizetti, Verdi y Puccini, y un final con la guitarra para tocar canciones latinoamericanas”. “Estoy contento de ir a Girona a cantar y creo que el público quedará muy contento”.
Como no podía ser de otro modo, el ataque en Ucrania también preocupa a Flórez, que el 4 de abril participará en el Concierto por la Paz que se hará en el Scala de Milà y uno de sus objetivos es conseguir fondo para ayudar a los afectados por la guerra. En este concierto, dirigido por Riccardo Chailly, se interpretará el Stabat mater de Rossini, “una pieza realmente muy bella”. “La música puede dar un mensaje importantísimo de paz y todavía más desde el Scala, uno de los máximos templos de la ópera mundial –asegura–. Cuando me propusieorn cantar, enseguida intenté cambiar los compromisos que tenía para poder confirmar la presencia. Creo que el mundo de la música se está uniendo en todas partes para transmitir este mensaje de paz y de condena a la guerra. Es muy importante”.
Juan Diego Flórez no hace volar palomas, pero confía en “la esperanza” que es capaz de comunicar la cultura y así lo ha vivido a raíz de la crisis causada por el coronavirus. “Hace poco hice dos funciones de la ópera Lucia di Lammermoor en Múnich y fue maravilloso. A pesar de tener el aforo reducido al 70%, poco a poco vamos llegando a la normalidad tan deseada. La cultura no tiene que parar, es lo que nos mantiene vivos y con esperanza”.
Efectivamente, el ecosistema musical se va reavivando después de dos años muy complicados que han supuesto todo un “desafío”. “Me replanteé muchas cosas”, dice el tenor. La falta de trabajo lo preocupaba, pero admite que le quitó el sueño mucho más tener que parar la actividad de Sinfonía por Perú, la fundación que, a la manera del sistema venezolano, “se ocupa de niños y jóvenes con pocos recursos y que mejoran sus vidas mediante la práctica colectiva de la música en orquestas y corazones”. “Pudimos reactivar la actividad docente online y al final pudimos beneficiar a más de 6.000 niños y jóvenes durante la pandemia”, explica. Ahora la Sinfonía por Perú está recuperando la actividad presencial y en los próximos meses hará la primera gira por Europa: “Llevaremos a unos ochenta niños a tocar conmigo al Festival de Lucerna, al de Salzburgo y al Menuhin de Gstaad”.
El Liceu y los buenos restaurantes peruanos
Para más adelante queda el regreso de Flórez al Liceu. El año pasado hizo un recital doble –eran días de aforo al 50%–, pero tiene ganas de cantar en una ópera. “Estamos hablando –avanza–. Sería muy bonito poder hacer algunas funciones de ópera en el Liceu. Echo mucho de menos este fantástico escenario, el público tan maravilloso y la posibilidad de estar más tiempo en Barcelona. Conozco la ciudad y su gente, y los restaurantes son muy buenos, especialmente los peruanos: hay muchos y buenos. Sí, siempre me lo paso bien en Barcelona”.