Judit Neddermann: "Con una sola lectura de 'Tierras muertas' no he tenido suficiente"

BarcelonaEl impacto de Tierras muertas (Anagrama, 2021) es profundo y permanente, como el de las grandes obras de la literatura. La primera novela de Núria Bendicho Giró (Barcelona, ​​1996) "es muy sólida, alejada de tanteos e ilusionismos vanos", decía Jordi Llavina hace tres años en la crítica publicada en el ARA. "Este libro no constituye ninguna promesa: es una realidad latiendo. ¡Hay talento, mucho!", añadía Llavina. El entusiasmo lo comparte Judit Neddermann, que recomienda Tierras muertas sin tapujos: "Empecé a leer y no pude parar. Es uno de esos libros que inaugura un mundo que me llama y necesito adentrarme. Con una sola lectura no he tenido suficiente. Ahora estoy leyendo- la por segunda vez", explica Neddermann.

La cantante de Vilassar de Mar explica que llegó a la novela de Núria Bendicho Giró gracias al director teatral Joan Arqué, con quien ha trabajado este verano a Tirando lo Blanco, la adaptación del clásico de Joanot Martorell que se estrenó en el Festival Grec de Barcelona y donde Neddermann se encargaba de la música. La recomendación de Arqué, pues, la llevó al universo de una estirpe familiar atravesada por dolores y violencias, un gótico rural catalán fascinante y brutal.

"Creo que está tan bien escrita... Todo lo que dice y lo que no dice, la historia, la densidad de esta familia aislada. Me sorprendió saber que Núria Bendicho Giró sea tan joven. La forma en que narra la muerte, el silencio y la dureza... Me parece que lo hubiese vivido muchos más años. ¡Toda mi admiración! Neddermann, todavía impactada por la lectura de Tierras muertas.