Mortadelo trabajará para servir más de 135.000 libros al día desde Cerdanyola

Cerdanyola del VallèsMortadelo ha encontrado un nuevo trabajo en Cerdanyola del Vallès. A partir de ahora el popular agente secreto creado por Francisco Ibáñez se instalará en el nuevo centro logístico que Penguin Random House acaba de inaugurar en Cerdanyola del Vallès convertido en uno de los robots que sirven pedidos día y noche, de lunes a viernes, aunque estas semanas de antes de Sant Jordi también trabaja sábados y domingos. De este gran almacén de 42.000 m², que ha costado 36 millones de euros, saldrán una media de 135.000 libros cada día.

El robot Mortadelo pasea ajetreado por uno de los pasillos del hub, que según Núria Cabutí, CEO de Penguin, es "el centro más avanzado de Europa" del sector editorial gracias a "la tecnología de vanguardia" que controlan sus 130 trabajadores. Lo que más llama la atención es que el personal humano convive con dos divisiones de robots de una implacable eficiencia. En un lado del centro están los 24 locus, robots colaborativos encargados de servir pedidos de alta rotación –novedades, bestsellers y clásicos–, entre ellos Mortadelo, porque cada uno ha sido bautizado con el nombre de un personaje de cómic, como Superlópez y Mafalda; en la otra, los 54 skypods, que circulan a toda velocidad por un circuito cerrado y suben por alguna de las torres metálicas llenas de volúmenes con el objetivo de "satisfacer 1.300 líneas de picking cada hora", comenta Martí Torra, director de logística del centro. "Tan importante es un gran pedido como el de uno o dos ejemplares", añade.

Los skypods transportan con celeridad su carga en cajas que llegan hasta los trabajadores humanos, que seleccionan a los ejemplares pedidos y los colocan en cajas de cartón que, más adelante, acabarán pasando por un nuevo proceso industrial, una máquina cerradora que no utiliza ni una migaja de plástico. "Tanto el centro como los procesos han sido pensados ​​respetando al máximo la sostenibilidad", dice Núria Cabutí. El trabajador coge un ejemplar de La pérfida Albión, de Paul Preston,otro de Los seductores, de James Ellroy, y dos ejemplares del cómic Mortadelo y Filemón contra Jimmy el Catxondo.

Un gigante editorial con 61 sellos

Al otro lado del centro, la colaboración entre robots y humanos debe ser más estrecha. Cada locus, entre ellos Mortadelo, cargan cuatro cajas que hay que llenar con los pedidos adecuados. Para completar el proceso es necesario identificarse, pasar el código de barras correcto y el número de ejemplares solicitados. Cuando un humano está cerca, los robots se detienen y esperan con paciencia tener vía libre para seguir trabajando. "Somos 130 trabajadores, divididos en tres turnos, mañana, tarde y noche –especifica Martí Torra–. Estas semanas previas a Sant Jordi la demanda crece mucho y podríamos llegar a servir 300.000 libros por día". Del centro de Cerdanyola salen cada día diez trailers con los pedidos, que tardan entre 24 y 96 horas en llegar al punto de venta. "Ahora mismo tenemos 20 millones de ejemplares de 24.000 títulos vivos, pero solo ocupan un 60% del almacén –sigue–. Si vamos ampliando podemos llegar fácilmente a los 30 millones".

Penguin Random House ha tenido que dejar el centro logístico que tenía hasta ahora en Pallejà porque se les había quedado pequeño. "Tenemos 61 sellos en castellano, catalán y portugués", comenta Núria Cabutí. El grupo vende anualmente unos 35 millones de ejemplares, pero con el aumento de capacidad del centro logístico y el crecimiento sostenido de las ventas, la cifra puede ir mucho más allá: durante la última década el sector editorial ha crecido un 30% en España. Además, Penguin Random ha abierto una nueva área de negocio dedicada a ofrecer servicios logísticos a otras editoriales, lo que incrementará el número de títulos que se distribuirán desde el centro de Cerdanyola.

Logista Libros, que distribuye desde Guadalajara el fondo de Grupo Planeta, el principal competidor de Penguin Random House, dispone de 22 millones de ejemplares en stock de un fondo de 255.000 títulos. En Cataluña, Les Punxes –que distribuye más de un centenar de catálogos editoriales, entre ellos los de Anagrama, Acantilado, Club Editor y Siruela–, tiene un almacén de más de 10.000 m², desde donde salen más de siete millones de ejemplares anualmente.

"Es imprescindible contar con empresas valientes como Penguin Random House que apuesten por el país", afirma la consellera de Economía de la Generalitat, Alícia Romero, frente a decenas de editores, libreros, distribuidores y algunos autores de la casa, entre ellos Julia Navarro, Javier Cercas, José Enrique Ruiz-Domènec y Regina Rodríguez Sirvent. La autora de Las bragas al sol ha visitado el nuevo centro logístico por segunda vez en pocos días. La semana pasada realizó una excursión para firmar 2.000 ejemplares de una edición limitada de su primera novela. "Las bragas al sol ha sido un fenómeno, pero no tengo tanta presión como dicen para escribir la segunda –comenta–. Tengo la sensación de que sigo haciendo lo que quiero. De eso se trata, ¿no?".