El niño de 13 años que amenaza con romper todos los récords de precocidad del Barça

BarcelonaTan sólo tiene 13 años, pero todo el mundo habla de él. Mohamed Dabone se ha convertido en la gran esperanza de futuro de un Barça que intenta protegerle todo lo que puede. El club azulgrana es consciente de que su impacto es determinante en las categorías de formación, pero quiere alejarle de las expectativas que genera. El objetivo es que llegue a ser el mejor jugador posible en unos años. La última hazaña de la joven promesa, que actualmente se recupera de una lesión, llegó hace unos días a la final de la Minicopa Endesa, en la que sumó 12 puntos y 9 rebotes en tan sólo 11 minutos y 39 segundos de juego ante el Real Madrid.

Dabone, que ya se ha entrenado con el primer equipo, está preparado para romper un puñado de récords de precocidad. El joven de Burkina Faso ya ha debutado con el Barça Atlètic, un equipo que compite contra rivales seniors en la Tercera FEB. Aunque él todavía es infantil, con el conjunto junior se proclamó campeón de la frase previa del torneo Next Generation de la Euroliga. Su promedio fue de 8,5 puntos y 7,5 rebotes.

Dabone mide 2,10 metros y está por crecer. El 22 de septiembre el joven interior disputó 17 minutos de un partido del filial en la Lliga Catalana contra el SD Espanyol. Con el equipo junior ha jugado 14 partidos, con una media de 16 puntos y una efectividad del 66% en tiros de dos puntos.

"Es el mejor jugador del mundo a su edad", dicen los especialistas. Algunos scouts de la NBA que estaban siguiendo la Copa del Rey en Las Palmas fueron a ver la final del Barça infantil en la Minicopa Endesa, donde por segundo año consecutivo fue determinante. Pau Gasol, Mario Hezonja y Leandro Bolmaro son los ex azulgranas que en su día fueron escogidos en una posición más alta del draft de la NBA, y la expectación que Dabone genera es similar a la que despertaba Victor Wembanyama, que actualmente juega en los San Antonio Spurs.

Àlex Terés, nombre clave

La cantera del Barça dio un salto adelante con la llegada de Àlex Terés. El secretario técnico del baloncesto formativo sacudió la estructura iniciada por Juan Carlos Navarro y Mario Fernández, organizando la distribución de jugadores de forma muy disruptiva. Su método ha servido para recuperar una voz dominante en un entorno formativo en el que el Real Madrid se había hecho muy fuerte.

Los resultados de la temporada 2023-24 fueron históricos, ya que el mini, el infantil, el cadete y el junior consiguieron el doblete en los Campeonatos de Cataluña y de España. Ocho títulos de ocho posibles, algo inédito al que se suma la Minicopa Endesa de Málaga y la fase previa del Next Generation Júnior de Belgrado.

"El balance fue muy positivo para muchas cosas, pese a que lo que más llama la atención son los resultados. Hacemos un balance que va más allá de los títulos y analizamos si los jugadores y los equipos han ido evolucionando y si sentimos que están más preparados. Ganar prácticamente todo lo que jugamos hace que se endulce el balance final, que todos s Alzamora como mano derecha.

El director técnico de la cantera destaca un elemento que caracteriza el trabajo diario en el baloncesto formativo azulgrana: la transversalidad. Con el objetivo de buscar la competitividad, el crecimiento de los jugadores y el máximo de partidos posibles durante los fines de semana, los jóvenes del Barça no tienen asignado por defecto a un único equipo, entrenador o compañeros. "Desde el punto de vista de los técnicos, la transversalidad completa que tenemos da un sentido de identidad", argumenta.

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