El Barça ha llegado a ir de gira sin contrato

BarcelonaEs fácil imaginarse las caras de los empleados del Barça que ya estaban en Kobe y de los periodistas que volaban en ese momento hacia Japón para cubrir la gira azulgrana cuando el club anunció el miércoles que no iría a causa del impago de la promotora, D-Drive. Las mismas que probablemente habrán puesto este jueves cuando han sabido que el Barça vuelve a plantearse viajar a Japón y jugar el domingo ante el Vissel Kobe después de que la empresa Rakuten, que está vendiendo las entradas del amistoso, se haya hecho cargo de la deuda. Posteriormente, el Barça debería volar hacia Corea del Sur para disputar los otros dos amistosos previstos de esta gira.

Para encontrar la última vez que el Barça masculino tuvo complicaciones graves con los promotores en una gira veraniega no hace falta ir demasiado atrás en el tiempo. Fue en 2018 en Estados Unidos, en una gira en la que también viajó el primer equipo femenino. En Dallas hubo una reunión tensa entre tres figuras fundamentales del club en ese momento: el presidente Josep Maria Bartomeu, el director general Òscar Grau y el director comercial Xavier Asensi (actual presidente de negocio del Inter Miami de Leo Messi). El problema era que el Barça ya había disputado el primer partido de esa gira, ante el Tottenham en Los Ángeles, y el contrato entre el club catalán y el promotor de la gira, la empresa Relevent Sports Group, aún no se había firmado.

"Debemos volver a Barcelona", dijo Asensi a Bartomeu y Grau en Dallas antes de jugar el segundo partido de la gira, ante la Roma. Además, el Barça aún tenía que jugar otro partido en Estados Unidos, frente al Milan en Santa Clara (California). A Asensi ya no le pareció nada bien que el avión del Barça saliera de Barcelona hacia Estados Unidos sin el contrato firmado, pero directamente consideraba que era inconcebible ir disputando partidos en la gira en la misma situación de desamparo legal. "No jodas", respondió Bartomeu a Asensi ante la idea de volver a Barcelona sin disputar todos los partidos previstos.

El Barça no escarmentó

La decisión del presidente prevaleció y el Barça jugó contra la Roma en Dallas y contra el Milan en Santa Clara sin el contrato firmado. De hecho, la expedición blaugrana aterrizó en Barcelona con la misma incertidumbre. Finalmente, el Barça y Relevent acabaron firmando el contrato a posteriori. Pese a esta mala experiencia, en el verano de 2019 el club también fue a buscar a la empresa estadounidense. Primero, hizo una gira precisamente por Japón con otra promotora. Pero, ante la necesidad de hacer más caja, el Barça decidió volver a Estados Unidos ese mismo verano.

La solución fue disputar dos amistosos contra el Nápoles que llegaron condicionados por un imprevisto de última hora: Leo Messi sufrió una lesión de primer grado en el sóleo y se quedó en Barcelona. El contrato, que esta vez ya estaba firmado antes de ir a la gira, especificaba que Relevent podía aplicar una penalización económica al Barça en caso de que Messi no jugara los partidos ante el Nápoles sin causa justificada. El Barça envió certificados médicos a Relevent para demostrar que la lesión del futbolista argentino era real, pero igualmente la empresa no se lo creyó y el conflicto se judicializó. El Barça y Relevent acabaron llegando a un pacto.