El Barça pasa página después de Lisboa ganando la Copa de la Reina
Dos goles de Clàudia Pina han abierto el camino del triunfo del equipo de Pere Romeu, sin rival en las competiciones domésticas
BarcelonaTras la decepción de la final de la Liga de Campeones perdida en Lisboa ante el Arsenal, el Barça cerró la temporada de la mejor forma, ganando la Copa de la Reina en Huesca contra el Atlético de Madrid (2-0). La herida de la Champions duele, pero en la liga española, el equipo de Pere Romeu sigue sin rival como ha quedado claro en una temporada en la que absolutamente todos los títulos les han ganado las azulgrana: Liga, Supercopa, y finalmente, Copa de la Reina. Claudia Pina, siempre eléctrica, siempre decisiva, fue la encargada de decidir el partido con dos dianas, la segunda de las cuales fue preciosa.
Al final, el Barça logró su undécima copa ante un Atlético de Madrid que soñaba con poder romper la buena racha de las catalanas en esta competición. No lo consiguieron. Romeu presentó dos novedades en el equipo inicial, con Ingrid Engen en el centro de la defensa y Esmee Brugts en el lateral izquierdo —ha sustituido a Fridolina Rolfö porque está lesionada—. Sería un partido especial para Engen, que en los últimos minutos del partido, fue sustituida por recibir la ovación de los aficionados, ya que éste será su último partido con la camiseta del Barça. Un último acto de servicio que acabó levantando un título.
Las azulgranas dejaron clara su condición de favoritas en un partido con un solo equipo en el control siempre. El equipo madrileño, con un planteamiento muy defensivo, jugó inicialmente bien las cartas con un bloque bajo muy sólido, pero en ataque solo fue peligroso en una acción al inicio de la segunda parte en la que lograron aprovechar un fallo de Cata Coll para marcar, pero en fuera de juego. Fue casi el único susto que sufrió la portería catalana en todo el encuentro.
Silbado en el himno
La final, que empezó con una buena pitada por parte de los aficionados del Barça presentes en el estadio El Alcoraz cuando sonó el himno español, era una gran oportunidad para el equipo de Pere Romeu de cerrar la temporada con un nuevo título, la undécima lejos un primer choque. de Patri Guijarro o un gol en propia puerta de Xènia anulado por la colegiada, porque en la acción anterior había salido el balón por la línea de fondo. Sin embargo, el Barça sabía aprovechar los espacios que su rival dejaba y, antes del descanso, encontró el camino del primer gol de la final. polaca Ewa Pajor.
En el descanso, el resultado era corto por el dominio de un Barça que veía cómo las madrileñas no cambiaban su táctica pese a ir perdiendo, más allá de momentos concretos de presión alta para intentar robar el balón. Las jugadoras entrenadas por Pere Romeu dejaron escapar ocasiones para marcar el segundo gol en varias ocasiones, antes y después del descanso, con los disparos de jugadoras como Salma Paralluelo, Alexia Putellas, Ewa Pajor o Aitana Bonmatí, quien aseguraba la posesión con su talento.
Debería ser de nuevo Clàudia Pina la encargada de sentenciar su 25º gol de la temporada, con un precioso disparo a la frontal, rodeada de jugadoras rivales, tras una buena jugada colectiva azulgrana.
"Lo debíamos a la afición, el equipo ha hecho un buen partido. Hay que dar importancia al resto de títulos pese al palo duro de la Champions; este equipo siempre se repone. La clave de mis goles es la confianza que me han dado tanto aquí como a la selección. La afición siempre está a nuestro lado, son muy importantes para ganar título. Una final que cierra la temporada de un Barça que sigue mandando, pero piensa ya en recuperar la corona europea.