Que fichen a Haaland, si quieren, que este Barça no lo necesita: los apuntes en caliente del clásico
BarcelonaDe la mano de un entrenador señalado por marcar una era, el Barça borró al Real Madrid en otra noche memorable en la casa blanca. A continuación, los apuntes en caliente de una victoria para soñar.
Un equipo. El clásico de la resurrección confirma que el Barça no necesita a Haaland para sobrevivir. Si el argumento económico ya sonaba creíble para enfriar el fichaje del superdelantero noruego, el orgasmo en el Bernabéu suma motivos deportivos muy contundentes para huir de la megalomanía. El equipo azulgrana tiene que enfocar su resurgimiento desde la vertiente colectiva, con el manual de Xavi por bandera y jugadores comprometidos en todas las líneas, con y sin pelota. Que se aparte Haaland si Aubameyang continúa en esta línea que tanto recuerda a Henry. Que fiche por el City, si quiere. O que lo bañe de oro Florentino si Mbappé acaba quedándose en París.
Xavi sale reforzadísimo. Su presencia en el banquillo culé, con todas las mejoras que conlleva, y con la carga emocional que arrastra de cuando jugaba, insta al madridismo a tragar saliva antes de cada clásico. No hay dudas: es un enfant terrible a la altura de Messi o Guardiola. Pero de puertas adentro, la goleada también consolida la figura del de Terrassa, líder del proyecto deportivo que permitirá sacar pecho a Laporta. Lo demuestra, por ejemplo, su gestión de Dembélé, que juega partidos importantes de titular en contra del criterio que había en el palco. En Concha Espina, el francés devolvió la confianza con dos asistencias más.
Bofetada al altavoz estatal. La sorpresa del once del Barça fue Eric Garcia, titular por tercera vez seguida. Xavi, que temía a Vinícius, desplazó a Araujo al lateral derecho y colocó al de Martorell junto a Piqué. La actuación de Eric fue colosal, una bofetada interesante para los que critican que sea un fijo en la defensa de la selección española. En el Bernabéu, catedral del altavoz estatal, se anticipó a decenas de jugadas de ataque del Madrid y demostró que es un central ideal para jugar los clásicos de la próxima década.
Ancelotti empequeñece al Madrid. La paliza catártica del Barça llega, todo se tiene que decir, en la jornada 29 de una Liga que el Madrid tiene encarada desde hace semanas. Por otro lado, quién sabe qué habría pasado si los blancos hubieran podido contar con su mejor jugador, Benzema. Tan importante es el galo que Ancelotti prefirió modificar todo el sistema antes que poner a otro atacante en su lugar. Por muy previsible que fuera, la variante sirvió para que Modric, que ocupó el falso nueve de entrada, perdiera las propiedades que exhibe cuando hace de interior. Con el croata desactivado, los azulgranas lo tuvieron más fácil para imponer su juego.