Qué orgullo verlos caer así: los apuntes en caliente del Madrid-Barça

BarcelonaEl Barça ganó el primer título de la temporada tras una formidable actuación frente al Real Madrid. Pese a jugar media hora con un hombre menos, los azulgranas resistieron por conservar una goleada, la segunda del curso contra el eterno rival, sin ningún paliativo. A continuación, unos apuntes en caliente.

El Barça destroza al Real Madrid en la final de la Supercopa

Un gran día para ser culé. Podría decirse que el Barça de Flick por fin ha vuelto, pero sería algo injusto, porque el día del Atlético ya mostró su versión dinámica y dominante de principios de temporada. La diferencia es que no marcó las ocasiones que tuvo. En Arabia Saudí, donde jugó un clásico en inferioridad ambiental, el acierto apareció para hundir a un Madrid previsible, desordenado y soberbio en el mal sentido. El álbum de cromos de Florentino ya ha fracasado en dos ocasiones esta campaña ante un Barça trabajado, solidario y humilde. Sí, que se cansen de contar a Champions y de tocar la corneta en el Bernabéu para asustar a Liverpools y Bayerns de turno. Contra los atrevidos azulgranas, contra La Masia, necesitarán mucho más que el escudo, la influencia y la billetera. Qué orgullo verlos caer así.

El mundo a sus pies. El Barça vapuleó al Madrid sencillamente porque es mejor equipo. Pero, encima, el conjunto azulgrana tiene la mejor individualidad posible: Lamine Yamal Podemos decir sin tapujos que el repertorio del jugador de Rocafonda con 17 años es más amplio y maduro que lo que tenían otros prodigios como Messi o Neymar a su edad. Ya no es que haga bailar cualquier marcador que tenga por delante –Mendy, especialista, va parecer un defensa de Segunda– con trucos aprendidos en la calle, sino que es capaz de hacer jugar a los compañeros como si los jóvenes inexpertos con todo para demostrar fueran ellos. Qué pena que la expulsión a Szczesny detuviera el espectáculo antes de tiempo. Lo único que le puede apartar de marcar una época es un mal asesoramiento fuera del campo o una pesadilla similar al de Ansu Fati.

Los jugadores que ganan (y pierden) campeonatos. El primer título de Flick sirve para celebrar la barra de adolescentes como Lamine Yamal y Cubarsí, pero también para dimensionar el valor de futbolistas que están en la flor de la vida. Raphinha encarna a la perfección esa condición. Qué pedazo de temporada, la del brasileño. Solo aprovechado por Xavi en el tramo final de su periplo en el banquillo, se ha convertido en un elemento decisivo en todas las grandes citas y también en el referente de un vestuario que lamentará la pérdida de otro líder natural como Araujo. Requerido en el clásico por la lesión de Iñigo Martínez, el uruguayo tiene un pie en la Juventus. Dará pena que deje ahora este proyecto por mucho dinero, pero también que el club no pueda pagar un capitán como se merece. Si tuviera Mendes o Zahavi como representante, ¿habría más margen? Nunca lo sabremos.

Dinero para poner un césped nuevo. Tres cositas más. La primera: el Barça goleó pese a Gil Manzano, que echó a Szczesny y perdonó la doble amarilla a Camavinga y Vinícius. La segunda: Laporta abandonará Arabia Saudita con el pecho hinchado gracias al primer título de la temporada ya la cautelar en el caso Olmo; ganas de escuchar ahora sus explicaciones sobre los 100 millones de euros cobrados de no se sabe dónde a cambio de no se sabe qué para compensar a toda prisa dos negativas judiciales antes de Fin de Año para driblar el fair play financiero. Y la tercera: si los saudíes quieren comprar el fútbol mundial, iría bien que invirtieran en seguridad privada en las gradas y sobre todo en algo tan sencillo como un césped en impecables condiciones El estadio de Jidda ha sido un auténtico campo de patatas durante toda la competición.

La Supercopa en directo: Real Madrid - Barça