El Espanyol aprende a utilizar los remos
Los blanquiazules derrotan con solvencia al Alcorcón y se sitúan en un punto de la zona de ascenso directo
Español 2 / Alcorcón 0
- FICHA TÉCNICA DEL PARTIDO
- Español: Pacheco; Omar, Calero, Cabrera (Sergi Gómez, 84'), Brian Oliván (Ramos, 76'); Jofre (Salvi, 66'), Gragera, Aguado (Bare, 66'), Expósito; Pere Milla (Keita Balde, 76') y Braithwaite. Entrenador: Luis Miguel Ramis
- Alcorcón: Jesús Ruiz; Yago López (Morillas, 84'), Castro, Mosquera, Quintillà; Chiki, Eteki (Artola, 74'), Mosquera, Addai (Chema, 84'); Dyego Sousa (Javi Pérez, 74') y Javi Lara (Víctor García, 55'). Entrenador: Fran Fernández
- Goles: 1-0 Pere Milla (45'), 2-0 Jofre Carreras (57')
- Árbitro: Sánchez López (Comité Murciano)
- Tarjetas amarillas: Víctor (61' y 70'), Braithwaite (68'), Gragera (85')
- Tarjetas rojas: Víctor, por doble amarilla (70')
- Estadio: Stage Front Stadium, 16.547 espectadores
“Somos un yate, pero nos tocará remar”, decía Fran Garagarza nada más aterrizar en el Espanyol. El director deportivo blanquiazul era consciente de que, sólo con nombres, a los pericos no les bastaría. Ante el Alcorcón (2-0), penúltimo clasificado de Segunda, el Espanyol tuvo que currar duro para acabar encontrando el premio deseado, un triunfo de gran valor que le mantiene a un solo punto de la zona de ascenso directo y que le sitúa a cinco del líder, un Leganés que hace sólo dos semanas estaba a nueve puntos.
Si el Espanyol se ha reenganchado en el tren del ascenso directo ha sido, en buena parte, porque Ramis –técnico más del gusto de Garagarza que Luis García– ha enseñado a la plantilla en tiempo récord cómo se' utilizan los remos. Un blog con empuje que sabe muy bien qué hacer sin la pelota, sobre todo cuando la pierde. El Espanyol tiene las ideas claras y ha dejado de ser un equipo blando para pasar a ser otro revitalizado que tiene una consigna clara: posicionarse bien para recuperar el máximo de balones en campo rival o, si no puede ser , impedir que el jugador rival avance con una falta táctica. Los blanquiazules no fueron brillantes, pero sí consistentes, gracias a un medio del campo trabajador en el que Gragera y Expósito están mostrando su despliegue físico junto a un Aguado que, además, añade un talento especial.
El centrocampista andaluz aporta criterio y liderazgo a un equipo donde ya marca las diferencias. Necesitó varias semanas para ponerse a punto físicamente, pero ahora, junto a Ramis, empieza a mostrar su mejor versión. Ante el Alcorcón estuvo en todas partes. Siempre sabe dónde posicionarse para ofrecerse a sus compañeros, sea en la base de la jugada o en los lados, y también es generoso con los esfuerzos defensivos. Por sus botas pasaron prácticamente todos los ataques de un Espanyol que supo rodear al Alcorcón en su mitad de campo. Casi todos terminaban en centros, mayoritariamente desde el lado izquierdo, donde Brian Oliván vuelve a reencontrarse con la mejor versión que ofreció el pasado curso.
El lateral conectó bastante bien con Braithwaite, que dispuso de tres buenos remates de cabeza. Pero quien abrió la lata fue Pere Milla, que justo antes del descanso premió los méritos y la insistencia local tras rematar, también de cabeza, un centro de Expósito. El de Cubelles, que con Ramis está firmando los mejores minutos desde que es jugador del Espanyol, tuvo a tocar el gol en dos peligrosos remates con la izquierda e inició la jugada con la que el Espanyol firmó el 2- 0. De un saque de esquina favorable a los visitantes nació un contragolpe letal, con Expósito disfrazado de velocista, Aguado llegando al área rival y Jofre, atento, pescando el rechace del portero al disparo de este último. El Espanyol no esperó para conseguir el tanto de la tranquilidad. Justo después, Oliván provocó que el Alcorcón se quedara con diez. Con el trabajo realizado, los blanquiazules quisieron aún más, pero Jesús Ruiz lo impidió. El Espanyol ha aprendido a utilizar los remos, ahora sólo queda recuperar la velocidad deseada y mantener el rumbo con firmeza.