Acciones carísimas a 1 céntimo y baratas a 1.000 €

De más de 1.000 dólares a algo más de 120 dólares por acción entre la noche y la mañana siguiente. Así evolucionó la acción de Nvidia, empresa tecnológica con sede en Estados Unidos. Seguramente, más de un pequeño inversor se llevó un pequeño susto, pero no, la acción no cayó un 90%. Lo que la empresa aplicó fue lo que técnicamente se llama un split.

Cuando hablamos de un split, aumentamos el número de acciones en circulación de una empresa y ajustamos su precio, de forma que el valor de la empresa resta el mismo. En concreto, en el caso de Nvidia, elsplit fue 1:10 y, por tanto, el precio de la acción se dividió entre 10 a la vez que el número de acciones se multiplicó por el mismo número.

Estas operaciones suelen darse para hacer más accesible la acción y para que parezca que está barata. Es pura psicología: mientras que a 1.000 dólares Nvidia parecía carísima, a 120 dólares parece tener mucho recorrido para seguir creciendo. Sin embargo, es una percepción totalmente alejada de la realidad.

El valor en bolsa de una empresa se llama capitalización, y depende del número de acciones y de su precio. Podemos tener 1 acción en 1.000 euros o 1.000 acciones en 1 euro, el valor total será el mismo. Un famoso supermercado ronda el (1) céntimo por acción desde hace años y no parece recuperarse. ¿Está la acción cara o barata?

El mismo efecto lo encontramos en las criptomonedas cuando valen 0,000001 euros; por mucho que tengamos miles de millones de unidades, el beneficio o la pérdida siempre dependerá de qué porcentaje de cambio tengan. Suba la criptomoneda a 0,000002 euros o suba Nvidia a 240 euros, nuestro beneficio será el mismo: haber duplicado la inversión. Y no, no es más fácil que pase la primera situación para que sea "más barata".

En resumen, que la psicología no nos juegue una mala pasada cuando invertimos. Ni una acción a 1 céntimo es barata ni una acción a 1.000 euros es cara.